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Pit Bulls: lo que debe saber si está buscando adoptar un perro de esta raza
Aunque ha sido estigmatizada por ser una raza potencialmente peligrosa, la verdad es que los Pit Bull son perros tranquilos y cariñosos. Los casos aislados de agresiones, según los expertos, se deben a una mala crianza o al maltrato de sus dueños.
Raza: Pit Bull terrier americano
Origen: Fue reconocida como raza oficial en Estados Unidos a finales del siglo XIX. Desciende de los antiguos bulldogs y terriers británicos, los antepasados de todos los perros terrier tipo bull.
Expectativa de vida: De 13 a 17 años
Tamaño: de 30 a 50 cm de altura
Tendencias
Peso: Entre 15 y 30 kg
Características
- Energía: 5
- Afecto: 5
- Cuidado: 4
- Docilidad: 3
- Inteligencia: 5
Compatibilidad
- Niños: 5
- Extraños: 3
- Otros perros: 3
- Otras mascotas: 4 (si socializa con otras mascotas o perros desde cachorro)
Fisonomía
- Cabeza ligeramente grande en proporción a su cuerpo y cuello corto.
- Orejas medianas con forma de rosa o semierectas que muchas veces las cortan por desconocimiento o razones estéticas.
- Hocico corto y nariz de color gris o rosa.
- Ojos pequeños y hundidos de forma elíptica. Pueden ser de colores oscuros o claros.
- Pelaje áspero, corto, liso y brillante, de uno o varios colores combinados.
- Es un animal de constitución atlética y puede llegar a tener más músculos por libra de peso corporal que cualquier otra raza.
- Su cola suele medir entre 30 y 50 centímetros.
Comportamiento
La mayoría de los Pit Bull son divertidos, nobles, inteligentes, obedientes, afectuosos y pacientes con los miembros de la familia (aunque como en todas las razas, hay sus excepciones).
El Pit Bull fue criado originalmente como perro de pelea, por eso su conducta suele ser valiente, determinada y en ocasiones, obstinada. Pero estas mismas cualidades lo hacen un fiel y leal protector.
Historia
El Pit Bull es originario de los Estados Unidos, donde se crió originalmente para el trabajo en granjas, como perro de caza y de compañía. La raza es el resultado del cruce de terriers y bulldogs europeos, y siempre ha sobresalido por su resistencia, inteligencia y fuerza. A lo largo de los años, los Pit Bull se convirtieron en perros de trabajo versátiles y compañeros leales; sin embargo, han sido entrenados como perros de pelea, y esto también contribuyó a popularizar su debatible reputación de raza peligrosa.
Cuidados
Son animales a los que les cuesta un poco relacionarse con otros perros, por ello, es muy importante su socialización y educación desde cachorros. No se recomienda dejarlos solos por mucho tiempo en casa. Esta es una raza muy activa que necesita ejercitarse y quemar mucha energía. Se deben sacar a pasear mínimo dos o tres veces al día.
En cuanto a su higiene, se recomienda bañarlos una o dos veces al mes, cepillar su pelaje un par de veces a la semana, y limpiar con periodicidad sus orejas con gasa.
Sobre su alimentación, un Pit Bull cachorro o joven puede comer tres veces al día, y de adulto, se recomienda que sean dos veces diarias. Asimismo, se aconseja no abusar del concentrado (por su composición química) y mezclarlo con comida natural.
En Colombia se consideran perros de manejo especial, de acuerdo a la Ley 746 de 2002, y por ello cuando salen a zonas comunes o espacios públicos deben tener bozal.
Sabías que…
- Aunque el Pit Bull tiene una presión de mordida de 235 PSI (libras por pulgada cuadrada), razas como el lobo siberiano, rottweiler, mastín y kangal superan por mucho su fuerza al morder.
- El Bulldog original, ancestro del Pit Bull, se utilizaba en Europa para arrear el ganado. También lo hacían participar en el ‘bullbaiting’, en el que se enfrentaban perros descendientes de la raza Mastín contra toros de rodeo.
- Recortar las orejas del Pit Bull puede afectar su comunicación con otros perros y cortarle la cola, alterar su equilibrio. Por eso, estas prácticas ya se han prohibido en varios países.
¿Una raza peligrosa?
Por estar asociada a las peleas clandestinas y debido a las noticias de agresiones en las que los Pit Bull son protagonistas, se ha convertido en una raza muy estigmatizada. Sin embargo, es importante recordar que estos perros son individuos y su comportamiento depende en gran medida de su crianza y socialización.
Para Enrique Zerda Ordóñez, biólogo y docente en Comportamiento Animal de la Universidad Nacional, “no existe ninguna raza peligrosa. Genéticamente todos los perros son agresivos por herencia, pero es una agresividad necesaria para poder sobrevivir en la naturaleza y así competir por la comida, la reproducción y el territorio. Pero esa conducta agresiva puede ser potenciada o controlada por la educación que le da el ser humano. En ese sentido, hasta un pinscher puede ser un perro peligroso”.
Ese comportamiento agresivo también puede empeorar cuando desde cachorro no tiene una socialización adecuada con otros individuos, tanto perros como seres humanos, o es maltratado de manera permanente.
“Un perro que se socializa y no se maltrata va a ser un perro tranquilo; mientras que un perro miedoso se vuelve potencialmente peligroso, pues al sentir miedo, ataca para defenderse y eso usualmente se debe a que lo maltratan, le pegan, no lo alimentan, no lo pasean y lo mantienen encerrado o encadenado. Entonces, son los humanos los que producen los perros peligrosos y no es su raza la que los hace agresivos”, precisa el docente.
Por su parte, David Bravo, médico veterinario y Líder de comportamiento del Instituo Distrital de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA), sostiene que los Pit Bull han sido muy maltratados en el país debido a su estigmatización y al desconocimiento de quienes tienen esta raza de perros sobre cómo es una buena crianza.
“Muchos de estos perros son criados en la periferia y sectores de bajos recursos, donde no se les da la crianza adecuada. Hay personas que tienen la idea de que por ser de esta raza, deben criarlos de una forma más fuerte, con golpes, regaños, y esto los vuelve defensivos o riesgosos. Eso mismo causa que la gente los estigmatice, y si hay alguno que haya mordido a alguien, en muchos barrios los linchan, envenenan o hasta los apuñalan”, advierte Bravo.
En la Unidad de Cuidado Animal del IDPYBA han atendido varios Pit Bull por maltrato y los rehabilitan y ayudan para el proceso de adopción.
“Hay muchos casos de perros de esta y otras razas similares que llegan por una mordida y son reportados a la Secretaría Distrital de Ambiente, pero cuando uno se pone a indagar, fue porque le dieron un palazo o lo intentaron agredir, cosas por las que cualquier perro se siente amenazado e intentará defenderse. Ahí es donde entramos a atenderlo, a veces llegan muy maltratados, nosotros los rehabilitamos y cuando vemos una evolución favorable, ayudamos a su adopción”, finaliza Bravo.
*Fuentes: Universidad Nacional y Hill’s Pet
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