Nutrición
Climariana y reducetariana, las tendencias alimenticias para proteger el medioambiente
Adoptar una dieta climariana o reducetariana es una gran opción para quienes no quieren dejar de comer alimentos de origen animal.
En el planeta millones de personas sufren los efectos de fenómenos meteorológicos extremos que se han agudizado en las últimas décadas por cuenta del cambio climático. Desde las extensas sequías del África subsahariana hasta las fuertes tormentas tropicales que golpean al sureste asiático, el Caribe y el Pacífico. Además, por si fuera poco, las altas temperaturas han generado mortales olas de calor en Europa e incendios forestales en países como Corea del Sur, Argelia y Croacia.
Este tipo de fenómenos despertaron una concientización necesaria en los seres humanos y, por ende, muchas personas en el mundo han adoptado diferentes dietas para velar por el cuidado del medioambiente. Así las cosas, dos tendencias en particular han generado un buen número de adeptos a nivel global: la alimentación climariana y reducetariana.
La palabra climariano o climariana se refiere a un individuo que elige lo que come teniendo siempre en cuenta el impacto medioambiental. Es una variante de la dieta flexitariana (que promueven la ingesta en gran medida de alimentos de origen vegetal y también de algunos de origen animal), pero constituida principalmente de frutas, verduras y legumbres. También incluye algo de carne de forma esporádica.
Cabe destacar que los climarianos comen carne, pescado, huevo, u otros alimentos, pero siempre fijándose en cuál es la huella de carbono que estos productos generan hasta llegar a la mesa.
Tendencias
Este tipo de alimentación es una buena alternativa para los consumidores que no quieren dejar de comer productos de origen animal y buscan opciones flexibles, saludables y sostenibles.
“Con las actuales dietas y prácticas de producción, alimentar a 7.600 millones de personas está degradando los ecosistemas terrestres y acuáticos, disminuyendo los recursos de agua e impulsando el cambio climático”, destacó un estudio de la Universidad de Oxford y del centro de investigación suizo LCA Research Group.
Para reducir dichas afectaciones a la tierra, también surgió el movimiento de alimentación reducetariana que consiste en minimizar la ingesta de productos de origen animal. Esta es una buena alternativa para quienes no desean hacer una dieta estrictamente vegana o vegetariana.
Vale resaltar que muchas personas en el mundo aún no saben que ya están reduciendo su consumo de carne. Para ellos también hay un nombre: reducetarianos subconscientes. De hecho, en este contexto surgieron campañas como el ‘Lunes sin carnes’ (Meat Free Monday), una inciativa lanzada por Paul, Mary y Stella McCartney en 2009 con el objetivo de crear conciencia sobre el daño ambiental generado por la agricultura animal y la pesca industrial.
Esta propuesta insta a los consumidores a frenar el cambio climático, conservar los recursos naturales y mejorar la salud dedicando un día a la semana, el lunes, a comer a base de plantas.