Los altos estándares de calidad están asociados con el chocolate de Suiza.

CHOCOLATE

¿Por qué el chocolate suizo es reconocido como el mejor del mundo?

El consumo anual per cápita de chocolate en Suiza es de unos 11 kilos.

13 de septiembre de 2022

En el marco del Día Internacional del Chocolate surge una pregunta común: ¿por qué en Suiza se hace el mejor chocolate del mundo? La respuesta no es concluyente, pero existen una serie de razones que pueden explicar la afinidad de este producto y la nación europea.

Suiza fue uno de los primeros países en producir chocolate de manera industrial. En 1819, el empresario François-Louis Cailler fundó una fábrica en la comuna Corsier-sur-Vevey, cerca del Lago de Ginebra. La automatización adoptada en el proceso de elaboración en la planta de Cailler permitió reducir los costos y, a su vez, minimizar el precio de venta al consumidor.

En 1826, otro emprendedor llamado Philippe Suchard también abrió su fábrica de chocolate en Serrières, cantón de Neuchatel. Pero no fue hasta la década de 1890 cuando los herederos de Philippe, su hija Eugene Suchard y Carl Russ-Suchard, comenzaron con la elaboración de chocolate con leche, un producto inventado por Daniel Peter quince años atrás.

A partir de 1901, los hijos de Suchard empezaron a ofertar estos chocolates bajo el nombre de Milka, un acrónimo de Milch und Kakao, que en español quiere decir “leche y cacao”. Bajo esta denominación surgió la famosa marca de chocolates que, hasta hoy, envuelve sus dulces en un característico paquete color lila.

Todo esto contribuyó a que la industria suiza de chocolates se convirtiera desde principios del siglo XX en la más robusta del mercado global. De hecho, la Federación Suiza de Fabricantes de Chocolate (Chocosuisse) señala que los alemanes compran el 21% de la producción de chocolate suizo, seguidos por Francia con 11% y Reino Unido con 10%.

Esta industria generó en 2020 ventas por unos 1.382 millones de euros. En términos de volumen, la cantidad de chocolate producido durante ese año en Suiza alcanzó las 180.000 toneladas. Además, el consumo per cápita en este país por año fue de unos 11 kilos.

La textura del chocolate suizo es otro elemento diferenciador. “Tiene un carácter suave y cremoso que es resultado de una técnica innovadora, conocida como el ‘conchado’, que homogeniza la masa y permite un desarrollo óptimo del aroma. El inventor de este procedimiento es el creador del primer chocolate que se funde en la boca, Rodolphe Lindt, quien patentó su método en 1879, cuando dirigía una fábrica de producción en Berna”, destacó la página House of Switzerland.

Finalmente, están los altos estándares de calidad. El nivel superlativo no solamente se refleja en la selección de la materia prima, sino que también se vincula con la experiencia sensorial de su consumo. Un chocolate suizo auténtico y clásico debería generar en boca aromas finos y armoniosos que, posteriormente, no se transformen en amargor.