Sandra Correa: de publicista a ser la única chef ejecutiva de una importante cadena hotelera

El Día Internacional de la Mujer se conmemora cada 8 de marzo y tiene por objetivo resaltar la lucha de las mujeres por su participación en la sociedad y su desarrollo íntegro en pro de la igualdad.

Esta lucha tiene varias aristas, pues en todos los ámbitos económicos y sociales una mujer se enfrenta a diferentes desafíos para poder avanzar. Entre ellos está la industria gastronómica, en la que Colombia hoy en día resalta, de hecho, una colombiana -Leonor Espinosa- ostenta este año el título de mejor chef del mundo.

Ella es solo un ejemplo de las mujeres que se están haciendo renombre en este mundo de la élite gastronómica. Cocina SEMANA tuvo la oportunidad de conversar con la chef ejecutiva Sandra Correa, una publicista que hace más de 20 años decidió incursionar en el mundo de la gastronomía y hoy en día es la única chef ejecutiva de la cadena hotelera NH.

Para ella, la gastronomía y el mundo de la cocina la han recibido como una familia con brazos abiertos. Le han dado la oportunidad de trabajar y explorar su propia sensibilidad para incursionar en conceptos de belleza, amor y sostenibilidad en cada uno de sus platos.

“Yo desde siempre tuve como esa llamita de la cocina, pero nunca creí que podía hacerlo”, explica la paisa de ojos expresivos y corta estatura sobre el inicio de su carrera, específicamente en el mundo de la hotelería. “Cuando viví en Argentina me puse a estudiar como hobbie, luego hice pasantías y luego, sin darme cuenta, se convirtió en mi profesión”.

La carrera de Correa la ha llevado a conocer diferentes países, a empaparse de otras culturas y a crear, como ella misma lo dice, una familia en cada cocina que pisa. “Por más que trabaje en distintos lugares -ya he trabajado en Argentina, Uruguay y ahora regrese a Colombia- la connotación siempre es la misma: familia”.

Este sentimiento es algo que siempre intenta transmitir en sus platos. La sensación de hogar, de amor de madre y de sensibilidad de mujer. “Siempre que hago un plato pienso en eso, en el amor de mi abuela, en el toque femenino y en los detalles, ya sean flores o sabores, ya que para mí, los detalles implican amor”. De hecho, el menú de La María, su más reciente apuesta para el Hotel NH Collection WTC Royal (ubicado en Bogotá en la Cra 8a #99-55), es una oda al amor, en la que cada plato está decorado con flores y está inspirado en La María, la obra romántica más reconocida del escritor colombiano Jorge Isaacs.

En esa cocina, Sandra lidera a su grupo de cocineros y asistentes conformado, en su mayoría, por hombres. Cada uno de ellos le responde con un sonoro “sí, chef” ante cualquier solicitud y gracias a eso logran responder a eventos, catering, room service, entre otros servicios del hotel.

Correa sabe que el mundo en el cual trabaja está predominado por los hombres. “Yo creo que cuando llegué muchos me vieron, a mí una mujer y además pequeña, y se preguntaron: ¿podrá?”, explica al preguntarle sobre las dificultades que hay para una mujer en el mundo de la gastronomía, “y creo que les he demostrado que puedo y que sigo acá, incluso les cambió el concepto; los emplatados son más detallados y ahora hay más engranaje. Conmigo les toca sacar el lado femenino”, concluye Sandra.

Actualmente, según Bloomberg Business, de cada 160 puestos de jefe de cocina, solo 10 de ellos están ocupados por mujeres. El panorama que describe la asociación Mujeres en la Gastronomía (MEG) es el siguiente: las mujeres conforman el 93% de las personas que cocinan en casa, el 48% de los graduados de escuelas de gastronomía, el 39% de los cocineros en restaurante y solo el 18% de jefes de cocina o chefs.

“Yo creo que el mundo está cambiando, las mujeres tenemos una sensibilidad que nos juega a nuestro favor, pero creo que hay que perder el concepto de que [la gastronomía] es un mundo de hombres”, son las palabras de Correa al hablar de la situación actual de la desigualdad de género que existe en el mundo de la gastronomía. “Las mujeres somos capaces de todo, lo podemos lograr pero hay que arriesgarse a seguir los sueños y hacerlo con amor”.