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Cómo mantener la casa cálida en días fríos con trucos caseros y sin gastar dinero en calefacción
Las temperaturas muy frías pueden causar complicaciones de salud.

Las temporadas de clima frío pueden afectar no solo el bienestar, sino también la salud de algunas personas. Las temperaturas muy bajas aumentan el riesgo de resfriados, bronquitis o incluso problemas cardiovasculares. Las muy altas pueden causar deshidratación, fatiga o golpes de calor, por lo que es clave regularlas.
Dormir en un ambiente con temperatura agradable mejora la calidad del sueño y tener un ambiente cálido facilita el desarrollo de las diversas actividades en el hogar.
Por esta razón, adoptar estrategias que permitan mantener una temperatura adecuada es clave para conservar un buen ambiente en el hogar y de esta manera evitar complicaciones no solo de salud, sino económicas, pues el uso de calentadores aumentan el costo energético.
Así las cosas, es posible recurrir a trucos caseros que contribuyan a mantener la casa cálida. Uno de los primeros en los que se debe pensar es en abrir las cortinas durante el día para que entre el sol y caliente los ambientes, y en la tarde, cerrarlas bien para que el calor no se escape. Si las cortinas son gruesas, mejor ya que ayudan a aislar el frío.
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Sellar puertas y ventanas
Es importante verificar las puertas y asegurarse de que queden muy bien cerradas, pues por las rendijas y marcos mal cerrados se va mucho calor y, además, se cuela el frío. Para evitar que esto suceda es posible usar burletes autoadhesivos o incluso una toalla enrollada en la parte inferior de la puerta para cortar el paso del aire.
Otro truco es cubrir las paredes más frías. Hay puntos específicos de la vivienda en donde no da mucho sol y es posible que esas paredes se enfríen con frecuencia trasladando eso al ambiente. Una forma fácil de evitarlo es cubrirlas y para ello se puede poner estanterías de madera con libros o decoración.
El portal Hogarmanía indica que en caso de que sea una pared con ventana, la recomendación es colocar una cortina que la cubra, pues esto ayuda a reducir el frío.

De igual forma, es clave cubrir el piso, pues hay algunos de ellos que tienden a ser fríos dependiendo del material del que esté hecho. Además, si se tienen huecos o grietas en el suelo, es muy probable que a través de ellas se cuele el frío. Sellarlas permitirá mantener el calor sin tener que hacer uso de la calefacción en casa.
Otra alternativa es aprovechar el calor de la cocina. Por ejemplo, si se cocina algo al horno, dejarlo abierto un rato después de apagarlo ayudará a mejorar la temperatura en el ambiente.
Si definitivamente se debe usar un calentador, para ahorrar energía es clave no utilizar en diferentes puntos de la casa, sino solo el lugar en el que las personas se encuentran, por ejemplo, la habitación. Es muy importante cerrar las puertas para concentrar el calor donde se necesita.