Cómo
El mejor tip para lavar las toallas de los baños y eliminar las bacterias
Mantener una buena higiene en estas toallas es fundamental para proteger la salud y la piel.


Según expertos, lo ideal es cambiar las toallas del cuarto de baño cada 3 0 4 días para prevenir que proliferación de hongos y bacterias y para mantener en ellas condiciones de higiene óptimas que, además, de dar un toque de limpieza y frescura al baño, protegerán la salud, evitando alteraciones e irritaciones en la piel.
El proceso de limpiar las toallas se torna más difícil cuando llegan los días calurosos, esto se debe al aumento de la temperatura en este lugar hace que las condiciones de humedad se disparen, esto provoca que toque cambiar las toallas con mayor frecuencia. Al momento de cambiar estas toallas, las personas suelen cometer el mismo error, el de lavarlas con agua fría, según la experta Marga Díaz, explica por qué esto no se debe hacer.

Marga Díaz, experta en limpieza del hogar, cuanta los tres errores que suelen cometer las personas al lavar las toallas del baño. “Las toallas del baño inmediatamente huelen mal porque la humedad favorece el crecimiento de los gérmenes”, indicó la experta y habló sobre los tres hábitos que se deben evitar si se busca conseguir un lavado eficiente.
“Si lavas a manos de 60 grados, no eliminarás los gérmenes“, comentó esta experta. Y mencionó que si se hace, ”añade Sanytol textil para la colada, porque elimina olores a cualquier temperatura", agregó.
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No obstante, apostar por una temperatura alta para lavar las toallas, es lo mejor para conseguir eliminar correctamente las bacterias y los ácaros que viven en ellas y que se forman con la humedad. Esto es un aspecto que se debe tener en cuenta, sobre todo, con las toallas que se usan a la hora de hacer ejercicio.

No usar suavizante
Aunque se piense que, de esta forma, quedarán más suaves, lavar las toallas con suavizante "dificultará la capacidad de secado y puede dejar una película en las fibras de la toalla que atrapa la humedad“, explicó Marga Díaz.
Cuando se añade suavizante a los lavados de las toallas, además, se conseguirá que estos textiles reduzcan su capacidad de absorción y pierdan su calidad característica, no consigan secar correctamente y pueden causar irritaciones en la piel, sobre todo a las personas con pieles sensibles.