El método infalible para quitar el hielo acumulado en el congelador; toma apenas unos minutos

La acumulación de hielo en el congelador es un problema común en muchos hogares y puede afectar tanto el rendimiento del electrodoméstico como la conservación de los alimentos. Este fenómeno se debe a varias razones, desde la humedad en el ambiente hasta fallos en el sellado de la puerta.

Uno de los principales factores que provocan la formación de hielo en el congelador es la entrada de aire caliente y húmedo. Cuando la puerta del congelador se abre con frecuencia o se deja entreabierta, el aire exterior entra y, al entrar en contacto con el frío extremo del congelador, la humedad se condensa y se convierte en hielo.

Otra causa de la acumulación de hielo en el congelador está relacionada con el empaque de goma que rodea la puerta, el cual tiene la función de mantener el frío en su interior. Si este sello está dañado, desgastado o sucio, el aire exterior puede infiltrarse constantemente, lo que genera acumulación de escarcha en las paredes del congelador.

Sumado a esto, colocar alimentos calientes dentro del congelador puede generar vapor, que al enfriarse se condensa y se convierte en escarcha. De igual manera, si los alimentos están mal organizados y bloquean las salidas de aire, pueden interferir con la correcta circulación del frío y favorecer la formación de hielo.

En los congeladores con sistema de auto-descongelado, una obstrucción en el drenaje puede hacer que la humedad se acumule en las paredes y se convierta en hielo.

El sencillo truco que ayuda a derretir rápidamente el hielo acumulado en el congelador

Por fortuna, para solucionar este problema existen formas efectivas de prevenirlo y garantizar que el congelador funcione de manera óptima.

Uno de esos trucos infalibles, según el sitio web Wiki How, requiere usar papel aluminio en conjunto con agua caliente, un método que permite acelerar el proceso de derretimiento de las paredes de hielo del freezer o congelador en cuestión de minutos.

Estas son las instrucciones para ponerlo en práctica:

• Desenchufar la nevera.
• Calentar agua hasta casi el punto de hervor, pero que no pase la temperatura de los 100 °C, de lo contrario se correría el riesgo de dañar la parte interna y afectar su normal funcionamiento.
• Cubrir las paredes del congelador con papel aluminio. Para ello se requiere retirar cualquier alimento almacenado. Esto permitirá que el calor se propague de manera homogénea y se conserve en ese espacio.

• Poner en un bowl el agua caliente y llevar el recipiente al congelador.
• Cerrar la puerta de la nevera o de ambos si así se requiere y esperar cinco minutos.
• Revisar que el agua no se enfríe y si es así cambiarla por más caliente.

Con este truco poco a poco podrá notar que las capas de hielo comienzan a desaparecer evitando dañar el electrodoméstico y logrando su objetivo de reestablecerlo en pocos minutos.

Cabe mencionar que una vez el hielo se haya derretido, se recomienda repasar la superficie con un trapo húmedo y luego con uno seco.