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Joyas como nuevas: 3 formas simples de limpiar la plata y recuperar su brillo
Estas piezas suelen tomar un color negro y pierden su característico brillo.

Las joyas de plata son accesorios populares entre personas de todas las edades. Relojes, cadenas, pulseras y anillos son el complemento ideal de un buen vestuario. Además, cuentan con un valor especial, ya sea económico o emocional. Al ser elementos con un valor inimaginable, sus dueños buscan la manera de mantenerlas en perfecto estado.
En algunas ocasiones, estas piezas suelen tomar un color negro y pierden su característico brillo. No obstante, estos problemas tienen una solución.

Estos son los mejores métodos para limpiar las joyas de plata.
Bicarbonato
Uno de los trucos más usado para limpiar las joyas de plata es el uso del bicarbonato de sodio.
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Mezclar este producto con vinagre blanco, aproximadamente una cucharada disuelta en 1/4 de taza del líquido, genera una mezcla en la que se puede dejar remojando la plata. Una vez los químicos de esta mezcla actúan sobre la joya, se limpia y seca con un paño suave.
Si no cuenta con vinagre blanco, puede utilizar papel aluminio. Para este método toca forrar un recipiente con este papel, luego colocarle agua hirviendo, la suficiente para sumergir las joyas que quiera limpiar.
Una vez sumergió la plata, debe agregarle al agua dos cucharadas de bicarbonato. Luego de varios minutos, saca las joyas y las limpia con un trapo seco.

Agua caliente
Otra buena opción para limpiar las joyas es el agua caliente con detergente para loza.
Una vez realizado este proceso de limpieza, toca remover los restos del producto con un paño húmedo y luego con uno que esté seco.
Pasta de dientes
Otro método clásico de limpieza de estas joyas es la pasta de dientes, la cual ofrece excelentes resultados.
Para este truco se debe frotar la pasta de dientes con un cepillo de dientes suaves o bastones de algodón. Luego se limpia con un paño.

Así puede pulir la plata
Puede que después de lavar estas joyas se vean limpias, pero continúen con una apariencia opaca. Si este es su caso, lo ideal es utilizar un poco de limón con sal.
El primer paso para pulir las joyas es cortar un limón por la mitad, colocarle sal y frotarlos contra la plata. Esta acción se debe repetir por varios minutos y luego se enjuaga y se seca con una toalla.

Otra opción es aplicar productos más corrosivos, como gotas de aguarrás en un pedazo de algodón y frotarlo sobre la pieza.
Sin embargo, hay que tener cuidado, al ser un producto muy tóxico, hay que enjuagar muy bien la joya antes de volver a usarla.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de SEMANA.