Cómo

La milagrosa oración para pedir por la pronta recuperación de un ser querido

La oración sigue siendo una herramienta profundamente humana para buscar consuelo, sostener la fe y canalizar el dolor en medio de la adversidad.

16 de junio de 2025, 7:53 p. m.
La oración en momento dificultad es una herramienta usada por muchas personas.
La oración en momento dificultad es una herramienta usada por muchas personas. | Foto: Getty Images

Enfrentar una enfermedad, especialmente cuando afecta a un ser querido, representa una de las experiencias más complejas y emocionalmente exigentes en la vida de cualquier persona. Esta clase de situaciones suele estar marcada por una combinación de emociones intensas, entre ellas la tristeza, la impotencia, la ansiedad y el temor. En medio de este panorama, cargado de incertidumbre, muchas personas encuentran en la oración un recurso de consuelo, tanto a nivel emocional como espiritual.

La oración, entendida en su sentido más amplio, va más allá del ámbito estrictamente religioso. Si bien en numerosas tradiciones culturales y credos se considera un canal directo de comunicación con lo divino, su valor también puede residir en el simple acto de detenerse, reflexionar y expresar —en palabras o pensamientos— las emociones más profundas. Para muchos, esta práctica representa un ancla de esperanza y una vía para recuperar cierta estabilidad emocional cuando el entorno parece colapsar.

Personas en oración
Muchas personas hacen cadenas de oración por la recuperación de un familiar. | Foto: Getty Images

Desde una perspectiva espiritual o religiosa, la oración suele concebirse como un diálogo íntimo con una fuerza superior. En este contexto, el portal hozana.org propone distintas fórmulas de oración para pedir por la sanación de un ser querido.

“Padre nuestro que está en los cielos, vengo delante de ti reconociendo que solo Tú eres Dios. Reconozco que eres Dios de amor, de compasión y de misericordia. Por eso, hoy te pido que te acuerdes de (nombre de la persona), que está enfermo/a de _________.

Te pido, Señor, que extiendas tu mano sanadora hacia (nombre de la persona). Te pido Señor que quites el dolor de su cuerpo. Te pido, Señor, que confortes su alma durante estos momentos difíciles. Te pido, Señor , qué (nombre de la persona) sepa que Tú estás a su lado siempre.

La Biblia dice que Tú le has dado autoridad a tu hijo Jesús sobre todas las cosas. Así que yo declaro que, en el nombre de Jesús, la enfermedad se va de (nombre de la persona). Tengo fe que tú, Señor, tienes el poder para sanar. Confío que la obra de sanidad está hecha en (nombre de la persona).

Gracias Señor por escuchar mi petición. Gracias por tu amor y por tu misericordia. Gracias por tus grandes obras. Gracias por la salud de (nombre de la persona). Que tu voluntad sea hecha, en el nombre de Jesús, amén.”

Oración por los enfermos
Oración por los enfermos para que logren sanidad. | Foto: Getty Images

Además de las oraciones dirigidas directamente a Dios, algunas personas recurren a figuras espirituales como el arcángel San Rafael, considerado en la tradición como un protector y guía en procesos de curación. A él se le atribuyen intervenciones milagrosas en el Antiguo Testamento. En momentos de dificultad, se puede elevar una plegaria como la siguiente:

“Dios te bendiga, santo arcángel Rafael, pues, tú eres uno de los siete maravillosos arcángeles del Señor, que trabajan día a día por la obra divina. Guíanos en el camino de la sanación, pues por tu intermedio es solo Dios, el que sana. Tú que caminaste con Tobías, curaste a Tobit, venciste a Asmodeo, encadenándolo en Egipto, y liberaste a Sara, camina a mi lado, guíame, enséñame y revélame lo que debo hacer.

Te pido especialmente, que por la sabiduría que Dios te ha concedido, y apelando con todo mi corazón a la misericordia divina, que nace del Padre, se expresa en el Hijo y se materializa en el Espíritu Santo; que tengas a bien elevar, sanar, proteger y liberar a (decir el nombre del enfermo) que tanto lo necesita.

Bendice especialmente sus medicamentos, y a los médicos que lo asisten, para que, guiados por la fuerza vivificadora del Espíritu Santo, la salud habite en armonía en ese cuerpo, ese espíritu y esa alma de nuestro Señor. Amén.”

Noticias relacionadas