Cómo
¿Por qué las personas olvidan lo que sueñan?: científicos revelan truco para recordar estas experiencias oníricas
Los sueños son experiencias subjetivas mentales.


Los sueños son considerados una experiencia importante para la salud mental, física y emocional. A través de ellos se logra procesar información, son buenos para consolidar la memoria, a la vez que ayudan a estimular la creatividad.
Todas las personas tienen sueños mientras duermen, a lo que también se le conoce como experiencias oníricas. Se trata de vivencias subjetivas mentales, que normalmente se caracterizan porque presentan una historia (narrativa), es decir, una secuencia de eventos ordenados.
Normalmente, son inusuales, irreales y hasta extraños, traspasando los límites de la realidad. En muchas oportunidades los individuos no recuerdan lo que soñaron y, de acuerdo con los expertos, hay algunos trucos que ayudan a traer a la memoria estas experiencias.

Un estudio dado a conocer en la revista Communications Psychology identificó diversos factores que influyen en la capacidad de recordar los sueños al despertar. La investigación, realizada por la Escuela de Estudios Avanzados IMT de Lucca y la Universidad de Camerino en Italia, involucró a más de 200 participantes de entre 18 y 70 años.
Una de las conclusiones de la investigación es que las personas con una actitud positiva hacia los sueños y una tendencia a la divagación mental tienen más probabilidades de recordar sus experiencias oníricas.
Así mismo, los patrones de sueño desempeñan un papel crucial. Aquellos que experimentan períodos más largos de sueño ligero tienen mayor facilidad para recordar sus sueños al despertar. Este tipo de sueño facilita la transición entre el mundo onírico y la vigilia, permitiendo que los recuerdos de los sueños se fijen mejor en la memoria consciente.
Una de las formas de tener presentes los sueños es escribiendo de ellos, tan pronto la persona se despierta. Si no se puede explicar con palabras lo que se acaba de soñar, una buena alternativa es recurrir a las imágenes.

Sin embargo, no se puede perder tiempo, hay que hacerlo de manera inmediata y comenzar de atrás hacia adelante, pues, de acuerdo con los expertos, los recuerdos más nítidos son los últimos.
En un artículo publicado en la revista Psychology Today, el profesor y psicólogo Preston Ni, explica que una forma de poner en marcha esta técnica es ir de la última imagen a la anterior y así sucesivamente hasta intentar llegar al inicio. Con los ojos aún cerrados, recuerda tantas escenas y detalles de tu sueño como sea posible. A veces son pocas cosas, otras veces las imágenes y las acciones pueden ser muchas y se plasman en el escrito o en la imagen.
Para el experto, es importante recordar las diversas emociones que la persona sintió durante el sueño, como felicidad, excitación, incertidumbre, desafío o miedo. Por ello, es de vital importancia intentar recapitular se sintió dentro del sueño, no justamente las sensaciones que se experimentaron al despertarse, sino la experiencia dentro del mismo.
Una de las recomendaciones de Ni es que cuando ya se tenga una buena cantidad de sueños apuntados, lo ideal es trata de asociar emociones positivas o negativas a cada uno de ellos.