Este año hubo más firmas que buscan avalar candidatos a la presidencia para las elecciones de 2026 que votantes, en comparación con la segunda vuelta en las elecciones de 2022. Los políticos presentaron 28 millones de firmas ante la Registraduría, muchas más que los 22 millones de personas que salieron a votar en la pasada elección.

Los precandidatos, incluso, triplicaron la cantidad de rúbricas que se recogieron para 2022 y van a poner a trabajar a la Registraduría todo el fin del año para revisar cada una de esas firmas. Lo cierto es que la recolección se convirtió en todo un negocio porque las empresas de logística, contratadas por las mismas campañas, pueden cobrar 40.000 pesos por cada planilla diligenciada.










