Otty Patiño, el Comisionado de Paz del Gobierno Petro, cuenta por qué ha estado ausente los últimos meses. “Me sentí horrible”

En una extensa charla con la periodista María Isabel Rueda, el comisionado de Paz, Otty Patiño, dio unas declaraciones que generaron una aireada respuesta del ministro de Justicia, Eduardo Montealegre.

El Comisionado de Paz del Gobierno Petro, que es quien lleva la batuta de las negociaciones con los grupos armados, no se mostró muy de acuerdo con el proyecto de ley de desmantelamiento de bandas criminales que el minJusticia radicó para esta legislatura.

“Con el ministro Montealegre hablamos solo una vez. Cuando nos vimos, discutimos sobre algunos de los elementos, principalmente del procedimental. Es decir, cómo lograr que las fuerzas políticas que están en el Congreso apoyen la iniciativa, lo que es fundamental. Empezar desde acá no es bueno. Hay que comenzar desde lo mínimo y ver cómo se amplían los elementos que sean más incluyentes, como qué sucederá con los militares que hace ya rato pagan prisión y con otra gente que ya cumplió su pena y todavía no le dan su libertad. Pero a quién se deja o no en libertad tiene más que ver con la Rama Judicial”, dijo.

El alto funcionario también contó un tema que había generado suspicacia e inquietud, y es su distanciamiento de la vida pública. La razón tiene que ver con un tema médico.

“Me recuperaba de unos quebrantos de salud producidos por el trabajo. Fue un accidente, digamos, bobo: simplemente, al entrar al vehículo, me golpeé con el marco superior de la carrocería. No le paré muchas bolas, pero me dio un dolor de cabeza terrible, así que el internista me ordenó un TAC. Y de ahí me mandaron a urgencias. Me operaron al otro día, tenía un hematoma bastante grande. Después viajé a México y regresé muy mal. Descubrieron otro hematoma, y yo le cuento que ha sido el peor posoperatorio que he tenido en la vida. Me sentí horrible”, narró.