“China es un socio muy valioso para Colombia”

China es un socio valioso para Colombia y una prioridad para la política exterior del país. Desde que nuestras naciones establecieron relaciones diplomáticas, el 7 de febrero de 1980, el diálogo bilateral se ha ampliado de forma fluida y amistosa. Hoy nos satisface tener unas sólidas bases políticas, económicas y de cooperación, sobre las cuales trabajamos el relacionamiento de los dos países, y su presencia en los ámbitos regional y multilateral, como lo son el Foro China-Celac y el Foro de Cooperación América Latina-Asia del Este (Focalae), por mencionar algunas.

El intercambio comercial entre ambas naciones ha crecido en los últimos años. Hoy China es nuestro tercer destino exportador y el segundo origen de nuestras importaciones. Existen oportunidades para aumentar y diversificar las exportaciones colombianas en ese país (que cuenta con más de 1.300 millones de personas).

Le puede interesar: Cómo entender a China desde Occidente 

El sector agrícola es un ejemplo del atractivo de ese mercado debido a su creciente demanda por alimentos. Por eso, buscamos concretar el acceso para productos como el aguacate hass y la carne bovina, cuyos trámites de admisibilidad se encuentran culminados. También hay oportunidades para las pulpas de frutas, chocolates, galletas, frutas secas y cafés especiales, entre otros.

La economía naranja ofrece oportunidades para ampliar la agenda bilateral. Basta recordar que en 2017 Colombia se posicionó como el cuarto mercado latinoamericano de videojuegos (por valor de 291 millones de dólares), ámbito en el que China se consolida como el principal actor a nivel mundial. A su vez, nuestro país ofrece un ambiente favorable para la inversión de esa nación, con la que hace diez años suscribimos un Acuerdo de Promoción y Protección Recíproca de Inversiones.

En asuntos de cooperación, el panorama también es positivo. Desde 2010 las contribuciones chinas han permitido el desarrollo de proyectos en áreas como desminado, seguridad y defensa, reducción de la pobreza, transporte e infraestructura, ciencia y tecnología.

Lea también: El 30 por ciento de la carne del mundo se consume en China

Por otra parte, China es un aliado invaluable para enfrentar desafíos como el cambio climático o la delincuencia organizada transnacional; ahora el reto es continuar identificando nuevas áreas. Ambos países somos reconocidos entre los más biodiversos del mundo, y su aprovechamiento sostenible puede ser un campo de trabajo y beneficio mutuo.

La cultura y la educación son herramientas esenciales para estrechar lazos y comprendernos mejor. En nuestros 38 años de relaciones diplomáticas esto se ha materializado en acuerdos entre universidades, intercambios artísticos, investigaciones conjuntas, cursos de idiomas y la apertura de tres Institutos Confucio en el país. El futuro, sin duda, es promisorio.

*Ministro de Relaciones Exteriores de Colombia.