Luis Pérez, gobernador de Antioquia. | Foto: Emanuel Zerbos

ENTREVISTA

Antioquia lidera la erradicación de mercurio en la minería

En entrevista con SEMANA, Luis Pérez, gobernador de Antioquia, afirma que el departamento es un referente nacional en la lucha para dejar de usar el metal, el cual está prohibido en la minería desde el pasado 15 de julio.

25 de julio de 2018

Semana: ¿Por qué Antioquia es un ejemplo de minería sin mercurio?

Luis Pérez: El mercurio es un asesino silencioso. Antioquia, que tiene el mejor oro del mundo, fue lamentablemente cayendo en la trampa mortal del mercurio y se convirtió en la región que más lo consume en el planeta. Hasta 120 toneladas anuales de mercurio se consumían en el departamento. Cifra horrorosa. Antioquia produce el 47 por ciento del oro de todo el país, de allí que el reto para eliminar el uso de mercurio en la minería antioqueña sea complejo. Hoy somos referente nacional en la lucha contra el mercurio: innovando con nano y biotecnología para el beneficio del mineral; formalizando y capacitando a más de 1.000 mineros ancestrales en uso de tecnologías limpias; dotando a nuestros indígenas con herramientas que sustituyen y superan el mercurio; invirtiendo 3.000 millones de pesos promedio anual para erradicar 22 toneladas al año de mercurio; conformando por ordenanza departamental un comité interdisciplinario para luchar intensamente y que no haya una sola gota de este metal en nuestros municipios. Es largo el camino, pero con paso firme y contundente, seremos el primer departamento del país en eliminar el uso del mercurio en la minería.

Semana: ¿Qué tanto se ha avanzado en su erradicación?

L.P: El estimativo que se tenía de consumo de mercurio en años pasados era de 140 toneladas anuales; hoy es de aproximadamente 40 toneladas/año, principalmente en la extracción ilícita y en la minería de subsistencia. La meta es reducir a cero este indicador con los programas y estrategias que se han venido adelantando.

Semana: ¿Como cuáles?

L.P: Menciono algunos: expedición de la ordenanza 24 de 2017 que crea el comité interinstitucional que coordina las acciones para eliminar el uso del mercurio en la minería; construcción de tres plantas de beneficio comunitarias con uso de tecnologías limpias; apoyo técnico a 92 plantas de beneficio existentes; capacitación a más de 2.000 pequeños mineros; aplicación de biotecnología para reducir hasta en un 80 por ciento el consumo de cianuro en el proceso de beneficio; recuperación de 1.400 hectáreas afectadas por minería ilegal; y de fuentes hídricas contaminadas por mercurio en Sonsón, El Bagre y Tarazá. También destaco la construcción del Centro Industrial Minero en Segovia; la firma de un pacto con los principales municipios mineros para eliminar el uso del mercurio en sus territorios; apoyo a comunidades indígenas y a mujeres chatarreras para que dejen de utilizar este metal; formalización de más de 1.000 mineros y capacitación de 20 mineros ancestrales segovianos en Italia.

Semana: ¿Cómo afecta al departamento la minería ilegal e informal?

L.P: Cerca del 80 por ciento del oro extraído en Antioquia proviene de la minería informal y de la mal denominada minería ilegal. Ambas utilizan mercurio para beneficiar el oro, pero es esta última modalidad la que reporta los más graves daños por cuenta del uso indiscriminado del peligroso químico: contaminación de nuestras aguas, envenenamiento de nuestros pueblos y de las generaciones venideras, destrucción de la fauna y flora por bioacumulación. Hoy estamos ganando la pelea  y el caso exitoso de Buriticá es ejemplo para el mundo.

Semana: ¿Qué se está haciendo para contrarrestar sus efectos?

L.P: En relación con la minería informal o ancestral, la Gobernación junto al Ministerio de Minas ha impactado 67 municipios en las nueve subregiones del departamento, formalizando a más de 1.000 mineros, capacitando 7.914 barequeros en uso de técnicas ambientalmente responsables, apoyando a 1.400 indígenas mineros con tecnologías limpias. En cuanto a la extracción ilícita de minerales, la Secretaría de Minas ha atendido oportunamente más de 402 amparos administrativos en puntos de perturbación de titulares mineros formales. Con jornadas de formalización, en las que participa la Dian, se han eliminado los registros de comercialización a 17.037 ilegales que fraudulentamente vendían mercurio.

Semana: ¿Cómo avanza la relación con las comunidades ancestrales con quienes ya han logrado trabajar en la formalización y legalización de la pequeña minería?

L.P: Este gobierno ha reconocido y defendido a los pequeños mineros ancestrales, quienes reportan producciones cercanas al 30 por ciento del oro extraído en Antioquia. Mediante estrategias de relacionamiento con grandes empresas titulares, se les han otorgado incentivos de formalización, representados en tierras para el desarrollo de su actividad. A esto se suma la aprobación de más de 1.000 subcontratos de formalización y la capacitación a 1.504 pequeños mineros en técnicas de minería social y ambientalmente responsable.

Semana: ¿Cuál es el presupuesto para todas estas acciones?

L.P: Se ha ejecutado un presupuesto promedio anual de 3.000 millones de pesos. Actualmente, se tiene un estimativo de 6.000 millones para 2018 distribuidos en capacitaciones, transferencia de conocimiento e investigación aplicada.

Semana: ¿Dejará al final de su administración una Antioquia sin mercurio?

L.P: Esto requiere de la unión de esfuerzos entre empresarios, una comunidad empoderada de su territorio y un gobierno con autoridad y carácter que ofrezca las alternativas para eliminar este flagelo. Con la estrategia Municipios Libres de Mercurio buscamos que los principales entes territoriales de las nueve subregiones del departamento erradiquen por completo el uso de este elemento. Para ello firmamos el Pacto Antioquia Sin Mercurio, que actualmente se ejecuta.

Semana: ¿Qué representará para el departamento ese legado?

L.P: Ser un referente nacional. La respuesta a las distintas políticas gubernamentales en materia de formalización y de eliminación de mercurio han hecho de Antioquia un verdadero laboratorio del que todos podrán aprender y con experiencias para replicar.

Semana: ¿Quiénes son los grandes aliados en este esfuerzo?

L.P: Internacionales, el gobierno americano y canadiense a través de sus operadores Chemonics International Inc. y Agriteam, con el que tenemos suscrito un Memorando de Entendimiento y Acta de Intención para promover la formalización minera, la eliminación de mercurio, la recuperación de áreas degradadas, así como la sensibilización y capacitación con la comunidad minera de nuestro departamento.

Semana:¿Qué lecciones podría compartir con otras regiones del país que también deban prescindir del uso del mercurio?  

L.P: Colombia ha tenido una cultura equívoca de medioambiente. Los recursos naturales se tratan como violín prestado. Es necesario construir una nueva cultura ambiental entre los colombianos, más humana. Más sensible al medioambiente, más respetuosa de nuestros recursos naturales. El uso criminal del mercurio y la forma rudimentaria de extraer tanta riqueza con el oro son una muestra de salvajismo en minería. Esta tarea requiere insistir, persistir y nunca desistir en la sensibilización sobre los efectos en la salud del uso del mercurio, que aunque se lleva cerca de 10 años hablando del tema, aún existen incrédulos y personas que sobreponen el interés individual del lucro sobre el interés colectivo del cuidado del medioambiente y de la salud pública.

Semana:¿De dónde viene ese deseo por apostarle a una Antioquia sin mercurio? 

L.P: Del anhelo por consolidar un medioambiente sano que garantice el cuidado del aire, agua y los suelos en todo el territorio de nuestro departamento; elementos absolutamente necesarios para el bienestar de la población actual y las futuras generaciones.

Semana:¿Cómo se imagina la industria extractiva de oro del departamento en 50 años?

L.P: La minería tiene que modernizarse como todas las áreas de la economía limpia. Me gustaría ver una minería con empresarios prósperos, comunidades florecientes y un medioambiente conservado.

Semana: ¿Cuál cree que será a largo plazo el impacto para el país y la región de haber suscrito y ratificado el Convenio de Minamata?

L.P: Es un llamado a construir una nueva cultura ambiental. Un grito en favor de la vida y de la naturaleza. La ratificación del Convenio de Minamata permitirá que las diferentes acciones regionales y nacionales que se vienen adelantando puedan integrarse y generar resultados de impacto en materia de eliminación del mercurio no solo en la minería sino en todos los procesos industriales del país, en donde los avances que tenemos en Antioquia podrán ser un referente nacional. Quedan otros aspectos, como disposición final y temporal del mercurio de lo cual aún no hay una claridad sobre la entidad del orden nacional que vaya a manejar este tema desde el punto de vista presupuestal y técnico y que a través de esta ratificación tendrán que tener una pronta solución.

Semana:¿Es posible hacer minería limpia y responsable?

L.P: Tiene que ser posible. Para qué minería sin agua. Para qué minería con violencia, miseria y desiertos. La minería tiene que evolucionar más, pensar en la riqueza material, en el medioambiente y en la gente que espera prosperidad.

Semana: ¿Cómo van a beneficiarse los municipios mineros de este cambio?

L.P: Mi sueño es que los municipios sean socios por derecho propio de las empresas mineras que se instalen en sus territorios. Los municipios y las comunidades son las primeras dueñas de sus territorios y qué bueno que disfruten en parte de sus riquezas. Esto llevaría a una bella armonía entre empresarios y comunidades.