Fundación Santa Fe de Bogotá es reconocida con el Nivel Oro por sus innovaciones en la atención en salud

Innovación tecnológica, atención humanizada y generación de conocimiento son algunos de los criterios que determinan la calidad del servicio de una entidad de salud. Sin embargo, las cualidades del cuerpo médico que complementan dichos factores generan un valor superior en cualquier institución.

Ese es el caso de la Fundación Santa Fe de Bogotá, donde sus especialistas se caracterizan por su idoneidad. Para lograr contar con el mejor equipo de profesionales, la institución elige el talento que se identifique con los valores internos de la organización y con su filosofía de atención centrada en la persona, lo cual se ve reflejado en desenlaces clínicos superiores.

Son profesionales con dedicación completa a sus pacientes dentro del Hospital Universitario, que se caracterizan, además, por su labor docente y su capacidad investigativa. Así lo explica Hernán Bayona, director del Centro de Cuidado Clínico de Ataque Cerebrovascular de esta institución: “La honestidad y excelencia son valores que pregonamos con firmeza. Por eso nos preparamos muy bien y hacemos las cosas de la mejor forma posible para dar resultados óptimos a nuestros pacientes”.

Estas características marcan la diferencia, porque según Juan Carlos González, jefe del Departamento de Ortopedia y Traumatología y director del Centro de Cuidado Clínico de Reemplazos Articulares, “vivir la institucionalidad nos permite tener una inmersión directa, trabajar en armonía y estandarizar procesos. De esta forma podemos alcanzar diagnósticos más acertados y tratamientos más efectivos. Todo por las necesidades particulares de cada paciente”.

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Esto permite que la Fundación Santa Fe de Bogotá cuente con un grupo de especialistas con las más altas cualidades, apasionado por el servicio y el compromiso social. “Adicionalmente, y por tratarse de un hospital universitario –enfocado en medicina de alta complejidad–, cuando el profesional ya forma parte de la institución vive en un constante proceso de actualización y capacitación para constatar que esas competencias se mantengan y mejoren en el tiempo”, agregó Jairo Roa, jefe del Departamento de Medicina Interna.

Esa incidencia educativa que impacta de manera positiva la vida de los pacientes y sus familias tiene una gran aliada, que los médicos de la Fundación Santa Fe de Bogotá aplican muy bien: la innovación tecnológica. La premisa de los especialistas no es traer el dispositivo de moda, sino la tecnología que haya demostrado ser funcional en beneficio de la persona. Y todo nuevo procedimiento o tecnología debe ser aprobado por el comité ejecutivo, pues lo primero es brindar seguridad y confianza al paciente.

Atención humanizada

En la institución todo gira en torno al ser humano. Así lo argumenta Ana Milena López, directora del Centro de Cuidado Clínico de Ortogeriatría: “Gran parte del diferencial es que nuestra atención está centrada en la persona y su entorno familiar. Eso hace que el trato sea muy personalizado”.

En este sentido, la institución cuenta con el Departamento de Atención al Paciente y su Familia, creado para facilitar la relación entre la fundación y sus pacientes. También ha diseñado, entre otros, el programa de Acompañamiento Espiritual y el servicio de Humanismo y Bioética, con el fin de que la experiencia de los pacientes sea cálida, compasiva, segura y oportuna.

De hecho, la Fundación Santa Fe de Bogotá cuenta con la designación Planetree nivel oro por Excelencia en Cuidado Centrado en la Persona, y por su modelo de atención en la que los profesionales de la salud se asocian con las familias y los pacientes para comprender sus necesidades y así entregar un servicio respetuoso con sus valores y preferencias que genere una recordación memorable.

Esto le ha permitido ser una institución líder en servicios integrales en salud, lo que garantiza una atención de nivel superior, cálida y humana en medio de un espacio hospitalario que busca contribuir de manera positiva en la recuperación del paciente en entornos agradables, y que aporten a mejorar su estado anímico y espiritual.