El Fotomuseo está a punto de desaparecer: esta es su plegaria de salvamento

“Estamos muy cerca de cerrar el Fotomuseo”, dice.

Gilma Suárez, su directora, no puede esconder la urgencia en su tono o en sus palabras. Por 21 años esta iniciativa se ha propuesto retratar la ciudad, mostrársela a sus ciudadanos, y así crear una ola fotográfica que en 2020 los llevó a ampliar sus fronteras pero también a abordar la dura virtualidad.

Fotomuseo ha propagado arte y regado curiosidad artística en sus ciudadanos, a quienes ha hecho participes de sus convocatorias y concursos. Les ha llevado la fotografía a sus calles y estos han respondido. Su relevancia no es menor. Varias imágenes ganadores de Fotomaratones del pasado ilustran esta nota.

Frente al riesgo de desaparecer, y en un intento por evitarlo, Fotomuseo le escribió esta carta que compartimos abajo a la Alcaldía Mayor de Bogotá. Frente a la no respuesta de la administración, su creadora lanzó lo que llama el “momento de salvamento”.

Suárez asegura que además de este llamado a la Alcaldía, también se está haciendo una Fotodonatón, “en la que me están acompañando muchos fotógrafos. Tenemos 1.127 obras donadas. También tenemos los módulos del Fotomuseo”. Esta, asegura la mujer que dio vida a esta iniciativa, es una bienal nominada en el exterior como el mejor evento de América Latina.

La carta dice:

Hace 21 años se creó el FOTOMUSEO. Y desde el primer día su vocación fue salir a las calles, vincularse con la vida pública, exhibir las fotografías en plazas y espacios de las diferentes localidades, transitados a diario por ciudadanos y ciudadanas, que se relacionaron desde entonces con lo mejor de la creación visual nacional e internacional.

Desde 2001 el FOTOMUSEO realiza en Bogotá la FOTOMARATÓN, el concurso más grande de fotografía en Colombia, por los premios que otorga y la cantidad de público que participa. El archivo visual elaborado por miles de ciudadanos y ciudadanas ya forma parte del patrimonio cultural de la ciudad y está dejando un testimonio vivo sobre las transformaciones en la capital, en todos estos años. Patrimonio realizado desde la mirada y la vivencia de sus habitantes.

En 2005 iniciamos la bienal internacional FOTOGRÁFICA BOGOTÁ, con exposiciones en salas de museos y galerías, en el espacio público, conferencias, ciclos de cine, talleres de los artistas internacionales en las universidades y colegios del Distrito, revisión de portafolios de los artistas internacionales a fotógrafos colombianos, La Noche de la fotografía, un espectáculo nocturno en las plazas de la ciudad y un libro que registra en cada edición las memorias de cada encuentro.

Documentales de los grandes maestros de la fotografía colombiana, ediciones de libros, promoción de los fotógrafos colombianos en el exterior entre otras actividades, todo esto ha hecho del FOTOMUSEO una institución querida y disfrutada por los bogotanos y bogotanas y apreciado internacionalmente, por su calidad y su sentido público.

Pero las dificultades que atraviesa la cultura en la ciudad, aumentadas severamente por la pandemia y el confinamiento, han tocado a la puerta del FOTOMUSEO, poniendo en peligro inminente su existencia y la continuación de sus actividades de servicio a la ciudad.

La ciudad no puede perder el sentido público del FOTOMUSEO (sancionado por el Concejo de Bogotá en 2006 como Bien de Interés Cultural de la Ciudad), su aporte a la convivencia social, el diálogo visual que proporciona a través de sus exposiciones y eventos y el patrimonio cultural que la ciudadanía ha construido a través de sus iniciativas durante todos estos años.

Por eso, los abajo firmantes, conscientes de la relevancia de la cultura en su Plan de Desarrollo “Un nuevo contrato social y ambiental para la Bogotá del siglo XXI”, le pedimos una acción urgente de salvamento que haga posible la continuidad del FOTOMUSEO.

Para que esta estrategia de rescate sea absolutamente tangible, avalamos la propuesta de exposiciones que la curaduría de la entidad propone a la Alcaldesa. De esta forma, no sólo podrá preservarse una institución que ya es icónica en la ciudad, sino que permitirá que la ciudadanía pueda disfrutar nuevamente de este ejercicio democrático del arte de la fotografía que ha sido la misión del FOTOMUSEO desde sus inicios.

Los firmantes

Beatriz González, Ana María Busquets de Cano, Maruja Vieira, Patricia Lara, Piedad Bonnet, Juan Manuel Roca, William Ospina, Abdú Eljahiek, Miguel Ángel Rojas, Claudia Hakim, José Alejandro Restrepo Rafael Santos Calderón, Flora Martínez, Fernando Cano Busquets, Santiago Harker, Carlos Satizabal, Luis Fernando Solórzano, Víctor Gaviria, Jorge Alí Triana, Jota Mario Arbeláez, Pedro Alcántara Herrán, Carlos Alberto Uribe, León Darío Peláez, Henry Agudelo, Guillermo Torres Reina, Andrés Sierra, Francia Escobar de Zárate, Ricardo Coral, Ana Mercedes Vivas, Álvaro Restrepo, Patricia Ariza, Héctor Fabio Zamora, German Ortegón, Luis Fernando Delgado, Alonso Garcés, Katya Regueros, Pastora Correa, Alejandra Laverde, Camila Calle, Mónica Herrán, Mauricio Moreno, Milton Diaz, César Melgarejo, Fernando Ariza, Néstor Gómez, Sebastián Dávila, Sebastián Jaramillo, Vanexa Romero Javier Nieto, Juan Pablo Rueda, Santiago Saldarriaga.

¿Qué es y cuándo empezó?

El FOTOMUSEO se describe como “una Fundación sin ánimo de lucro cuya finalidad es divulgar los grandes valores de la fotografía nacional e internacional, llegando a los distintos sectores poblacionales de la capital de Colombia por medio de exposiciones itinerantes de calle, que descentralizan y deselitizan la cultura”.

La Fundación FOTOMUSEO –Museo Nacional de la Fotografía de Colombia– fue registrada para efectos legales el 18 de agosto de 1998. Hizo presencia en el espacio público con la exposición “Miradas a Bogotá” el 6 de agosto de 2000 para festejar el aniversario de Bogotá con fotografías de varios fotógrafos que en sus registros tenían imágenes de la ciudad. Con el FOTOMUSEO nació el sistema pionero e innovador de módulos de exhibición transportables, para ser colocados en el espacio público.