Cultura
Este es el legado que le deja Fernando Botero a Colombia tras fallecer a sus 91 años
El reconocido artista antioqueño falleció en la mañana del viernes 15 de septiembre.
Fernando Botero fue una de los artistas más importantes, considerado como ícono dentro del arte contemporáneo. Nacido el 19 de abril de 1932 en la ciudad de Medellín, Colombia, estudió durante algún tiempo en la escuela de tauromaquia en la plaza de La Macarena de la ciudad de la eterna primavera. Sin embargo, tras un percance que tuvo con un toro, se dio cuenta que su verdadera vocación estaba enfocada en al arte, específicamente en la pintura, junto al modelado, tallado y construcción de esculturas.
Aproximadamente, en el año 1944 realizó su primer cuadro con la técnica de acuarela, la cual representaba un torero, recordando y haciendo énfasis en su viejo pasatiempo. Luego de varios años de desempeñarse en las técnicas de este oficio, Botero realizó su primera exposición artística en el año 1948 en una galería de la ciudad de Medellín.
Posteriormente, fue el encargado de realizar las ilustraciones para el periódico local El Colombiano, trabajo que le ayudó de forma impresionante para continuar con sus estudios en cuando a temas de arte y cultura. Durante sus años de juventud fue expulsado del Colegio Bolivariano tras redactar un extenso artículo sobre Picasso, el cual fue acompañado de diversos dibujos, los cuales, fueron catalogados como obscenos por los directivos y miembros de la organización de la institución. Por esta razón, tuvo que terminar sus estudios en el Liceo de la Universidad de Antioquia.
Gracias a su talento y dedicación en cuando a su formación sobre esculturas, tuvo la oportunidad de estudiar en prestigiosas escuelas y academias en países como Italia, Francia, Estados Unidos, México y Colombia.
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Este es el legado que dejó Fernando Botero
El nombre de Fernando Botero es uno de los más importantes a la hora de hablar sobre categorías de arte como lo son la pintura y las esculturas, pues son varios los lugares alrededor del mundo en los que resuena su trabajo y permanecen sus obras.
Medellín, la ciudad que lo vio nacer, y en la que se enamoró del arte y las expresiones artísticas, contiene en sus calles una numerosa colección de sus esculturas, pues el artista donó un total de 61 figuras, las cuales armonizan y le dan vida a la ciudad antioqueña.
Viacrucis: La pasión de Cristo es una exposición que se encuentra en el Museo de Antioquia y se denomina como una serie de obras de arte relacionadas al fallecimiento de Jesús de Nazareth y al dolor que experimentó mientras soportaba la agonía en sus últimas horas de vida.
A pesar de que Fernando Botero en un principio puso a la venta dichas pinturas, las cuales se encasillaban entre los 60 mil dólares, para los dibujos realizados en grafito, y en 500 mil dólares para lo que contenían color, finalmente tomó la decisión de donarlos a su ciudad natal para que pudieran ser admiradas por todos los habitantes de la misma y por turistas que llegaran a conocer el territorio paisa.
Pero no solo Colombia cuenta con espacios destinados a exponer su trabajo, son muchas las galerías de arte prestigiosas en el mundo, que contienen en su interior creaciones del gran artista, pues su desempeño en esta disciplina fue tan majestuoso, que dejó una huella imborrable en el desarrollo artístico a nivel global.
¿Cuál era el estilo de Fernando Botero?
Sus pinturas y esculturas se caracterizaban principalmente por contener figuras robustas y gruesas, las cuales fueron denominadas como ‘estilo figurativo boterismo’, que se convirtió en su sello personal, ubicándolo como uno de los artistas más cotizados y de mayor prestigio a nivel internacional.
Por otro lado, sus lienzos y cuadros se encargaban de plasmar y reflejar situaciones de la vida cotidiana de la cultura latinoamericana, siempre manejando el tema característico de su estilo, haciendo enfasís en las proporciones que sobrepasaban la realidad.