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Un golpe a la historia: Oklahoma City Thunder en la gran final de la NBA
El Thunder y los Pacers buscan hacer historia, se proclamará un campeón inédito en la NBA.
Con el inicio de una nueva final de la NBA, la expectativa entre los fanáticos del baloncesto no solo gira en torno a quién será el próximo campeón.
Sino también al hecho de que, por primera vez, dos equipos sin título se enfrentan por el anillo: los Oklahoma City Thunder y los Indiana Pacers.
Ambos conjuntos buscan grabar su nombre en lo más alto de la mejor liga de baloncesto del mundo, y esta final podría ser el punto de inflexión para una nueva era en la NBA.
El caso del Thunder es particularmente interesante. La franquicia ya ha pisado una final anteriormente, en 2012, cuando cayó frente al Miami Heat de LeBron James.
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Aquella serie dejó grabado en la memoria el potente trío conformado por Kevin Durant, Russell Westbrook y James Harden, tres talentos que prometían marcar una época, pero que nunca lograron conquistar el anillo juntos.
Durant fue parte del equipo desde 2007, cuando aún se llamaba Seattle SuperSonics, y acompañó a la franquicia durante 10 temporadas.
Tras mudarse a Oklahoma City, el equipo vivió una etapa dorada pero frustrante, con múltiples apariciones en playoffs, pero solo una final alcanzada.
En la temporada 2015-16, estuvieron cerca de volver, pero perdieron de forma agónica la final de la Conferencia Oeste ante los Golden State Warriors, quienes poco después incorporarían al propio Durant, dejando una herida abierta en los aficionados del Thunder.
Por su parte, James Harden fue el primero en abandonar al Thunder, se marchó después de aquella final perdida en 2012.
Mientras que Westbrook fue el que más tiempo duró en el equipo llegando en 2019 a los Houston Rockets.
Hoy, cada uno sigue su carrera en otras franquicias: Durant en los Phoenix Suns, Westbrook en los Denver Nuggets y Harden en los Los Angeles Clippers.
Mientras tanto, el Thunder ha apostado por una renovación completa, confiando en una nueva generación liderada por Shai Gilgeous-Alexander, Chet Holmgren y Jalen Williams.
Por primera vez desde su traslado a Oklahoma, el equipo no solo ha alcanzado nuevamente las finales, sino que llega como favorito, con un juego dinámico, balanceado y una profundidad de plantilla envidiable.
La gestión administrativa de la franquicia ha sido reconocida por su visión a largo plazo, construyendo pacientemente un proyecto sólido a través del draft y el desarrollo de talento joven.
La ilusión está en su punto más alto. Los fanáticos sueñan con ver al Thunder coronarse campeón y cerrar el ciclo que alguna vez pareció destinado a la gloria con Durant, Westbrook y Harden.
Hoy, el reto es para una nueva camada, que no solo deberá demostrar su calidad en la cancha, sino también convertir en títulos el trabajo de casi dos décadas.
