En Europa no hablan de otra cosa que no sea el resultado de la primera batalla en la montaña entre Juan Ayuso (UAE Team Emirates) y Primož Roglič (Bora-Hansgrohe) por la clasificación general del Giro de Italia.

Aunque Roglič se quedó con la maglia rosa, muchos aseguran que el que sale más fortalecido de la contienda es Ayuso: ganador de la etapa 7 y ahora segundo en la general.

Al esloveno le preguntaron si se sentía derrotado por su máximo rival en este Giro y la respuesta calentó las cosas de cara al fin de semana.

"No, simplemente, no estuve ahí, ¿eh? Uno siempre intenta dar lo mejor de sí y a veces se gana, a veces se pierde, pero en fin, lo disfruté hoy, así que estoy contento“, declaró.

“Tenía sueño”

El Bora-Hansgrohe había hecho todo el trabajo durante la etapa para seleccionar el grupo y al momento de los ataques, Roglič se quedó atrás para sorpresa de toda la fanaticada a nivel mundial.

Sobre ese perfil bajo, el nuevo líder aseguró que tenía sueño y que por eso le costó responder.

"Simplemente no estaba en la posición que debería. Tenía un poco de sueño. Así fue, simplemente no luché por la victoria hoy, pero en fin, fue un buen resultado“, insistió.

Ayuso, de 22 años, pasó primero en la meta, seguido por Isaac del Toro, de 21, y Egan Bernal, de 28. Roglič, a sus 35, reconoció que eso pudo ser un factor determinante.

“Es la primera etapa de montaña y necesito algo de tiempo. No soy tan joven, estos jóvenes empiezan enseguida; nosotros (los ciclistas veteranos) necesitamos algo de tiempo para, quizás, empezar a trabajar”, sentenció.

Primož no se da por vencido y saca pecho por tener la maglia rosa en su poder, aunque sabe que Ayuso es el fenómeno del momento que muchos ven como campeón de la presente edición.

Lo cierto es que el esloveno ya se mentaliza por si es que pierde el liderato de la general. ”Ya lo sé, sí, Ayuso es un tipo rápido y será un rival duro, pero es solo el comienzo del Giro, y la lucha continúa“, avisó.

Las esperanzas del veterano corredor reposan sobre el trabajo que hagan sus gregarios, entre ellos Daniel Felipe Martínez, después del retiro de Jai Hindley por una fuerte caída en la etapa anterior.

“Sin duda, fue una gran pérdida; Jai también ganó el Giro, pero así es el ciclismo, son cosas que no podemos cambiar. Los chicos de hoy estuvieron impresionantes después de ayer, cuando muchos se cayeron. Seguiremos trabajando“, analizó.

Antes de subirse al bus del Bora, insistió en su conclusión de este día en el que muchos lo califican como el perdedor. "Como pueden ver, Ayuso está cada vez más cerca, así que simplemente lo estoy disfrutando. Nunca se sabe cuándo es el último día con la maglia rosa“, finalizó.

Roglič ya sabe jugar este tipo de carreras, pues ya tiene en su poder cuatro títulos de Vuelta a España, uno en el Giro de Italia y podio en el Tour de Francia.