INTRODUCCIÓN

Así les fue a las 100 empresas más grandes del país... y las 900 siguientes

En medio de las dificultades, el sector productivo del país confirma su fortaleza y la economía muestra que hay razones para el optimismo.

19 de junio de 2021

Las empresas colombianas tuvieron la prueba más difícil de su historia en 2020. En un año inédito, la mayoría de actividades productivas frenaron en seco durante la cuarentena obligatoria y bajaron el ritmo para acatar las restricciones que buscaban fortalecer el sistema de salud y disminuir los contagios por covid-19. Garantizar la vida y la salud se convirtió en la prioridad.

Eso sí, la decisión de apagar la economía tuvo consecuencias. La vigencia pasada, el país se contrajo 6,8 por ciento, el desempleo se disparó –solo en abril llegó al 19,8 por ciento– y se destruyeron 2,4 millones de puestos de trabajo. En el ámbito social la tragedia fue mayor: la pobreza subió a 42,5 por ciento, afectando a casi 21 millones de colombianos.

Así lo confirman los resultados financieros de las 1.000 empresas más grandes del país, que SEMANA hace con base en los datos reportados a la Superintendencia de Sociedades y a partir de las respuestas enviadas por un grupo de firmas que respondió el formulario sobre los principales cambios económicos del último año.

Algunas tuvieron mejores resultados que otras. Por ejemplo, para 57 por ciento de las 1.000 Empresas de SEMANA aumentaron los ingresos. Y en materia de utilidades, 776 compañías, es decir, casi el 78 por ciento del total, reportaron ganancias. No obstante, las pérdidas en un segmento importante de firmas de minas y petróleo, servicios y transporte, provocaron una caída promedio importante en las utilidades.

Empresa de Licores de Cundinamarca
Planta industria licorera nacional
Siberia Cundinamarca
Junio 4 del 2021
Foto Guillermo Torres Reina / Semana
Empresa de Licores de Cundinamarca | Foto: GUILLERMO TORRES REINA

Eso sí, hay razones para el optimismo. En el formulario que respondieron 150 de las empresas más grandes se refleja que durante 2021 han tenido una recuperación del 5,9 por ciento en sus ingresos y de casi 203,2 por ciento en su utilidad neta. Para este año las perspectivas de este grupo de compañías lucen más alentadoras en lo referente a aumentar la inversión, los proyectos y la generación de empleo.

El país se alista para un 2021 de mejores perspectivas económicas, a juzgar por pronósticos de organismos como la Ocde, que ve un avance del PIB del 7,6 por ciento. Esto, sin embargo, dependerá de que se despeje el frente fiscal, en el que persisten dudas. Comenzando porque tendrán que reversarse algunos temas contenidos en la reforma tributaria de 2019, que buscó estimular la formalización de Colombia, la llegada de inversiones nacionales y extranjeras, y la creación de empresas.

A fin de lograrlo, se plantearon medidas como la reducción del impuesto de renta para las compañías, beneficios en la importación de bienes de capital y un descuento del ICA en el impuesto de renta, entre otras decisiones.

Expertos tributaristas insisten en que reducir las cargas de impuestos a las personas jurídicas, que generan empleo y prosperidad, es imperativo para Colombia, la nación con mayor tarifa de renta –del 32 por ciento– entre las integrantes de la Ocde, donde el promedio de este impuesto es del 22 por ciento.

Pero la crisis sanitaria suscitó una enorme presión en las cuentas fiscales por la atención a los más vulnerables; el interés del Gobierno de proteger el tejido empresarial con recursos –por ejemplo para la nómina– y un mayor endeudamiento.

Colombia está hoy enfrentada a la necesidad imperiosa de aprobar una nueva tributaria que le traiga recursos frescos para atender la crisis social provocada por la pandemia, y que ayude también a despejar el panorama fiscal en los próximos años.

La tensión social, sumada al remezón en las cuentas fiscales, ya ha dado señales de alerta: la calificadora Standard & Poor’s dejó a Colombia sin grado de inversión, y se esperan los pronunciamientos tanto de Fitch Ratings como de Moody’s.

Esta propuesta forma parte de los consensos que busca alcanzar el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, quien planea presentar la nueva tributaria en el segundo semestre de este año. Los empresarios están aportando a la solución de una situación coyuntural muy compleja. Y, así mismo, asumiendo gran parte del peso de lo que sería la nueva reforma.