Economía
Minutas del BanRep: expectativa de inflación cae, pero sigue arriba del rango meta
La encuesta de expectativas de abril mostró que las estimaciones a 12 meses disminuyeron de 7,2 % a 7 %.
El Banco de la República reveló este miércoles (3 de mayo) las minutas de la más reciente reunión de la junta directiva, en las que hablaron sobre un tema clave en la economía colombiana, como lo es la inflación.
De acuerdo con el documento, las expectativas de inflación total a un año comenzaron a caer, pero continúan aún por encima de la meta.
“La encuesta mensual de expectativas a analistas económicos realizada por el Banco de la República en abril mostró que en la mediana de la muestra las expectativas a doce meses disminuyeron de 7,2 % a 7,0 %; para finales de 2024 se mantuvieron en 5,0 %, y a 24 meses se sitúan en 4,0 %”, explica.
No obstante, para finalizar 2023 la encuesta registró aumentos de expectativas, las cuales pasaron de 9,0 a 9,3 % para la inflación total y de 8,7 % a 9,4 % para la inflación sin alimentos.
Tendencias
Según las actas de la reunión de la junta del Emisor, la inflación anual en marzo se mantuvo relativamente estable alrededor de un nivel ligeramente superior al 13 % anual, como el que se ha venido observando desde diciembre.
“Este comportamiento refleja en parte la reducción de la inflación de alimentos, que entre febrero y marzo disminuyó de 24,1 % a 21,8 % anual, en un contexto de buen abastecimiento y reducciones de los costos de las importaciones. En dirección opuesta, los servicios como salud, transporte y recreación, entre otros, han seguido presionando la inflación al alza, lo cual se reflejó en un incremento de 47 pb de la inflación básica sin alimentos ni regulados en marzo. Por su parte, la inflación anual de precios al productor que en marzo se contrajo por quinto mes consecutivo, señala que las presiones de costos estarían cediendo y apunta a que la inflación al consumidor empezaría a descender en los próximos meses”, argumenta.
Las minutas también hablan sobre la desaceleración de la actividad económica que comenzó a observarse a partir del cuarto trimestre de 2022 y siguió en los primeros meses de 2023, pero a un ritmo inferior a lo que se esperaba.
Esto se basa en lo revelado por el indicador de seguimiento a la economía (ISE) que tuvo una caída anual del 5,8 % en enero hasta 3,1 % en febrero.
“Esta tendencia la confirman otros indicadores líderes como la demanda de energía, las matrículas de vehículos, las importaciones en dólares y la cartera crediticia, que vienen registrando crecimientos bajos y en algunos casos negativos. Con base en esta información, el equipo técnico aumentó su pronóstico de crecimiento del PIB al 1% para 2023, lo cual significa que la economía lograría mantener el elevado nivel de producto que se alcanzó en 2022, pero que su expansión en el presente año sería moderada”, explica.
Respecto al déficit de la cuenta corriente, se espera que se reduzca desde el 6,2 % del PIB registrado en 2022 al 4,1% a finales de 2023.
“La moderación del desbalance externo obedecería principalmente al debilitamiento de la demanda interna, que ya se refleja en una caída de las importaciones. Adicionalmente, la renta de factores arrojaría un resultado menos negativo debido a que las utilidades remitidas al exterior por parte de las empresas con inversión extranjera en Colombia serían menores. Esto en parte se explica porque la reforma tributaria de 2022 aumentó las tarifas de impuestos a las empresas productoras de petróleo y de carbón, cuando los precios internacionales de estos productos básicos superaran cierto umbral, como en efecto ocurrió”, dice.
También se refirió a los incrementos en las tasas de interés por parte del Banco de la Reserva Federal de los Estados Unidos y el Banco Central Europeo, ante la persistencia de los altos niveles de inflación y ahora se esperan tasas ligeramente superiores durante el horizonte de pronóstico.
“El mayor costo de financiamiento global, la pérdida de ingreso real por los altos niveles de inflación mundial y las tensiones geopolíticas seguirán impactando la economía mundial y podrían desacelerar la demanda externa”, añadió.
Vale la pena recordar que la Reserva Federal de los Estados Unidos anunció un nuevo ajuste en la tasa de interés y un leve endurecimiento de su política monetaria, para mantener la lucha contra la inflación en este país.
De acuerdo con el comunicado emitido este miércoles –3 de mayo– la Fed aumentó en EE. UU. sus tasas en un cuarto de punto porcentual, es decir, en 25 puntos básicos, que era el rango esperado por los mercados para esta oportunidad.
El principal tipo de interés se sitúa ahora en una horquilla del 5,00 % al 5,25 %, la más alta desde 2006, tras una decisión unánime. Los responsables de la Fed afirman que observarán los efectos de las sucesivas decisiones para decidir si endurecen más la política monetaria a fin de llevar la inflación a la meta del 2,00 %.
La Reserva Federal de Estados Unidos ha decidido subir nuevamente las tasas de interés, en lo que se espera que sea la última subida antes de frenar el ciclo alcista iniciado en marzo para enfriar la inflación. No obstante, el Comité ha señalado que estaría preparado para ajustar la postura de la política monetaria si surgieran riesgos que pudieran impedir el logro de los objetivos.
“El Comité estaría preparado para ajustar la postura de la política monetaria según corresponda si surgen riesgos que podrían impedir el logro de los objetivos”, dijo la Fed a través de un comunicado.