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Frisby España contraataca y anuncia nuevo logo para su operación en Europa
Continúa la controversia jurídica entre la reconocida marca colombiana de cadenas de restaurantes y quienes la registraron en la Unión Europea.

Frisby España anunció un cambio en el logo de la marca, tras los debates jurídicos que ha sostenido con Frisby, la tradicional cadena de pollo frito colombiana.
En su cuenta de Instagram, esa empresa en España señaló: “Un nuevo logo. La misma ambición. Frisby se moderniza para hablarle a toda Europa. Una identidad más clara, más fuerte, más moderna. El sabor no cambia. Pero el paso que estamos dando es enorme”.
Y agregó: “Solo renovamos nuestra imagen para transmitir mejor lo que somos: una propuesta moderna, vibrante y de calidad. Frisby se moderniza para conquistar toda España. Nuevo look, mismo sabor”, afirmó en una de sus nuevas imágenes.
Este es el más reciente capítulo de la disputa jurídica que hay entre esta marca registrada en la Unión Europa y la cadena colombiana, que tiene un recorrido de más de 45 años de historia.
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Días antes, Frisby España, a través de un comunicado, dijo que no cesará el uso de la marca ni la expansión de la empresa, puesto que recibió una respuesta masiva y positiva en el programa de franquicias, el cual, señaló, superó ampliamente las expectativas.
“En pocas semanas, hemos recibido un número muy elevado de solicitudes procedentes de todas las regiones de España, confirmando la fuerza del concepto y el interés genuino del mercado. Para garantizar una selección rigurosa y avanzar con el nivel de excelencia que deseamos para cada futura unidad, hemos decidido pausar temporalmente la recepción de nuevas candidaturas a través del sitio web”, manifestó la empresa en España.
En ese momento, anticipó lo que se desarrolló posteriormente: un cambio en su identidad marcaria, a través de la actualización del logotipo, la eliminación del color amarillo, como color primario, y la actualización de la mascota, con una nueva propuesta visual.
Según esa empresa, con estos cambios, buscan alinearse “con las expectativas del consumidor europeo, avanzar hacia una propuesta de valor más sofisticada y coherente con una estrategia de posicionamiento de calidad, además de proyectar una imagen claramente independiente”.
Y anunciaron dos nuevos hechos: el primero, el inicio de acciones judiciales formales contra lo que llamó varios emisores de contenido difamatorio, “con el objetivo de defender la reputación y seriedad de la marca, proteger sus aliados y futuros franquicias y contribuir a un debate público, honesto”, indicaron.

El segundo, cambios en su administración. “Anunciamos también que el Sr. G. Barrenechea Correa ha cesado en sus funciones como administrador de la sociedad. Desde el inicio, su papel tuvo carácter transitorio, con el objetivo de acompañar el arranque jurídico y formal del proyecto. En vista de la aceleración actual del plan de desarrollo, será sustituido en los próximos días por una nueva figura administrativa, cuya designación será comunicada conforme a los trámites legales y alineada con la evolución estratégica del grupo”, afirmó la empresa.
Cabe recordar que Frisby en Colombia fue fundada en Pereira en 1977, hoy cuenta con 280 restaurantes en 60 municipios de Colombia y proyecta la apertura de 15 nuevos puntos de venta en 2025, con una inversión cercana a los 98.000 millones de pesos en infraestructura, tecnología, programas sociales y ambientales. Actualmente, la organización genera más de 5.600 empleos en el país. Su facturación anual se acerca a los 900.000 millones de pesos.

La reconocida empresa colombiana advirtió que se trata de un asunto estrictamente legal que está siendo gestionado ante las autoridades competentes y en las instancias correspondientes: “Es clave dejar en firme que Frisby S.A. BIC cuenta con registro de marca vigente en la Unión Europea, en España y en otros países del mundo. En consecuencia, estamos dispuestos a defender la marca y sus atributos de amplio reconocimiento, a través de los mecanismos legales respectivos”. Y advirtió que no tiene ningún tipo de relación con Frisby España, al tiempo que rechazó el uso indebido de su identidad de marca, “así como cualquier acción que busque aprovecharse de la reputación y trayectoria de la misma”.
De hecho, lo que muchos expertos han llamado una usurpación de la marca por parte de la empresa española desató una ola de respaldo de marcas colombianas a la cadena de restaurantes nacional.