JUAN RICARDO ORTEGA 
PRESIDENTE GRUPO DE ENERGIA BOGOTA (GEB)
FOTO: KAREN SALAMANCA
REVISTA DINERO
JUAN RICARDO ORTEGA PRESIDENTE GRUPO DE ENERGIA BOGOTA (GEB) FOTO: KAREN SALAMANCA REVISTA DINERO | Foto: KAREN SALAMANCA SÁNCHEZ

Empresas

Grupo Energía de Bogotá cerró la compra de otra compañía en Brasil

Además de Colombia y Brasil, la compañía tiene operaciones en Perú y Guatemala.

2 de febrero de 2022

El Grupo Energía Bogotá (GEB), a través de su filial en Brasil, Argo Energia Empreendimentos e Participações, cerró la compra del 100 % de Rialma Transmissora de Energia III, con la cual fortalece su presencia en este país suramericano. Con el cierre de esta operación, la empresa pasará a llamarse Argo IV Transmissão de Energia.

Rialma III es la empresa ganadora del Lote 30 de la subasta 005/2016 realizada por la Agencia Nacional de Energía Eléctrica de Brasil (Aneel) en abril de 2017. La concesión se encuentra en los estados de Piauí, Pernambuco y Ceará, y tiene a su cargo la construcción y operación de 322 kilómetros de líneas de transmisión en 500kv – C1.

El Grupo Energía Bogotá (GEB) inició un proceso arbitral contra Guatemala por la construcción de líneas de transmisión.

Esta nueva inversión contribuye al cumplimiento de las metas del Plan Estratégico Corporativo de la compañía, en uno de los mercados más atractivos para el sector de transmisión de energía eléctrica como Brasil, un país con una población superior a los 212 millones de habitantes, que está en crecimiento y tiene en operación más de 162.000 kilómetros de líneas de transmisión. Además, sigue consolidando al GEB como un jugador relevante en la cadena energética de América Latina, donde además de Colombia y Brasil, tiene operaciones en Perú y Guatemala.

En Brasil, el GEB está presente con Arg, que cuenta con tres concesiones a 30 años en los Estados de Ceará, Maranhao, Minas Gerais, Piauí, y Rondonia. Además, tiene 1.460 kilómetros de líneas de transmisión a 500 y 230 kV y once subestaciones. Argo fue adquirida en partes iguales por GEB y Red Eléctrica Internacional, de España. Con Gebbras, tiene en operación 1.094 kilómetros de redes de transmisión y 15 subestaciones.

Nueva inversión en Colombia

Transmisión, del Grupo Energía Bogotá (GEB), invirtió 13 millones de dólares (aproximadamente 50.000 millones de pesos) en la compra de 12 dispositivos smart valve, para optimizar la operación de la subestación Termocandelaria, ubicada en Cartagena y que apoya el suministro de energía eléctrica a una parte importante del Caribe colombiano.

La central de generación Termocandelaria, instalada en el sector industrial de Mamonal, aumentará su capacidad de 314 megavatios a 566 megavatios, lo que se traduce en una mayor disposición de energía para satisfacer la demanda y así incentivar el desarrollo regional, especialmente en esta época de reactivación económica.

La declaración de indisponibilidad de Termocandelaria en el pasado Fenómeno de El Niño disparó las alarmas.

Un smart valve funciona como si fuese un supervisor de supermercado que se encarga de regular el funcionamiento de las cajas registradoras y la cantidad de clientes que se atienden, por lo que a mayor cantidad de usuarios que tenga una caja (energía en una línea de transmisión), el supervisor los distribuirá en cargas iguales para que la atención al usuario no colapse (se presenten fallos en el sistema de transmisión de energía eléctrica).

Con la implementación de estos innovadores dispositivos, que se hizo gracias al trabajo articulado y efectivo entre Transmisión y varias áreas del GEB, la compañía contribuye a la seguridad energética del país. Además, entre sus ventajas funcionales, los smart valve ofrecen amplios beneficios ambientales y económicos, pues brindan soluciones a diferentes necesidades en un corto, mediano y largo plazo para el país, ya que disminuye la obligación de realizar nuevos proyectos de transmisión, como líneas y subestaciones, para evacuar adecuadamente la energía generada.

Esta tecnología representa una solución rápida y efectiva en la mitigación de congestiones de flujo de energía y permite evitar costos de redespacho y pérdida de generación por dichas congestiones; asimismo, maximiza el uso de las redes ya existentes y resuelve las limitaciones que tengan para dar mayor confiabilidad del servicio demando en el mercado.

Adicionalmente, con la puesta en operación de estos dispositivos, los riesgos de falla en la infraestructura eléctrica de transmisión serán menores, pues con el cumplimiento de sus funciones de regulación se eliminarán las sobrecargas en las líneas de transmisión y se optimizarán considerablemente los costos.