Economía

Importante empresa de comida rápida en Estados Unidos entró en quiebra

La marca declaró su bancarrota bajo el capítulo 11.

4 de marzo de 2025, 11:10 p. m.
La marca logró consolidar su poderío gracias sus famosos costillas. | Foto: http://www.cocinasemana.com/recetas/receta/costilla-cerdo-ahumada-anillos-cebolla/26056

Sticky Fingers Rib House, una cadena de restaurantes que se especializaba en costillas y parrilladas estilo sureño, ha anunciado recientemente su quiebra, poniendo fin a una era de éxito que duró más de tres décadas.

La marca, conocida por su ambiente informal, su menú de carnes asadas y su icónico aderezo para costillas, enfrenta ahora la realidad de los tiempos difíciles que atraviesa el sector restaurantero.

Esta noticia ha sido un golpe significativo para los fanáticos de la comida del sur de Estados Unidos, quienes veían en Sticky Fingers una de las principales opciones para disfrutar de un plato lleno de tradición y sabor.

Fundada en 1992, en Charleston, Carolina del Sur, Sticky Fingers logró rápidamente ganarse el cariño de los comensales gracias a su enfoque único en las costillas y la cocina a la parrilla.

Con el tiempo, la cadena creció y abrió sucursales en varios estados, consolidándose como un referente dentro del segmento de comida casual y de barbacoa.

Uno de los principales productos de Sticky Fingers Rib House y que generó seguidores fueron sus platos de costillas. | Foto: http://www.cocinasemana.com/recetas/receta/costillas-perfumadas-clavos-laurel/23070

Además de sus costillas, que se caracterizaban por su suavidad y sabor ahumado, Sticky Fingers también era conocida por su amplia variedad de salsas y su ambiente acogedor, ideal para reuniones familiares o de amigos.

Sin embargo, en los últimos años, la marca ha enfrentado varios desafíos que han complicado su sostenibilidad. La competencia en el mercado de la comida casual se ha intensificado, con nuevas cadenas ofreciendo menús similares a precios más competitivos.

A su vez, el creciente interés por opciones de comida más saludables y sostenibles ha provocado que muchos consumidores opten por alternativas más ligeras y ecológicas, un fenómeno que no ha sido ajeno a Sticky Fingers.

La pandemia de la covid-19, por supuesto, jugó un papel crucial en la caída de la cadena. Con el cierre temporal de restaurantes y las restricciones en la capacidad de los locales, Sticky Fingers, al igual que muchas otras cadenas de restauración, experimentó una drástica caída en sus ingresos.

Aunque intentaron adaptarse a los cambios del mercado con opciones de comida para llevar y delivery, la crisis económica global y la disminución en la asistencia a los restaurantes durante esos meses críticos fueron factores que afectaron aún más sus finanzas.

A pesar de los intentos por reestructurar el negocio y recuperar su posición en el mercado, la compañía no logró superar sus dificultades económicas.

comida rápida o comida sana
En la carta del restaurante se podían encontrar diferentes productos de consumo masivo. | Foto: Getty Images/iStockphoto

La acumulación de deudas, la falta de inversión en innovación y la competencia feroz en la industria finalmente llevaron a Sticky Fingers a solicitar la quiebra en el capítulo 11 de la ley de quiebras de Estados Unidos, lo que les permitirá reorganizar sus operaciones y tratar de salvar algunas de sus ubicaciones.

Sin embargo, la noticia de su quiebra ha sido un golpe al corazón de muchos de sus clientes leales, quienes lamentan la pérdida de un lugar emblemático para disfrutar de una buena comida.

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