La millonada que adeudan las EPS Sanitas, Sura y Compensar a los hospitales públicos en Colombia

El reciente pronunciamiento de los presidentes de las EPS Sura, Sanitas y Compensar ha puesto en el centro de atención la compleja situación financiera que enfrentan estas entidades y las consecuencias que esto podría tener para los 13 millones de afiliados que dependen de sus servicios. Sin embargo, esta alerta también ha puesto de manifiesto la millonaria deuda que estas EPS privadas tienen con los hospitales públicos en Colombia, una situación que arroja luces sobre los retos estructurales en el sistema de salud del país.

Los números hablan por sí mismos: Sanitas adeuda a las empresas sociales del estado colombianas un total de $179.433 millones, mientras que Sura mantiene una deuda de $110.742 millones y Compensar debe $56.418 millones. Estas cifras evidencian que la cartera pendiente de pago por parte de estas tres empresas privadas no es una cuestión de fácil recaudo, ya que los retrasos en los pagos varían desde 60 días hasta más de un año, superando los 360 días en algunos casos.

Ante esto, la directora Ejecutiva de la Asociación Colombia de Empresas Sociales del Estado, ACESI, Olga Lucía Zuluaga Rodríguez, ha subrayado la importancia de presentar una visión completa y objetiva de esta situación y recalcó que si las EPS han expresado que no se ha logrado una redistribución equitativa de los recursos, que existen deudas de presupuestos máximos, y que los indicadores financieros no se cumplirán al finalizar el año, es necesario también considerar la perspectiva de los prestadores de servicios médicos.

Esta vocera gremial destacó que desde los hospitales públicos han venido denunciando durante años la inequidad en la interpretación de las normas que otorgan a las EPS ventajas significativas sobre las Empresas Sociales del Estado (ESE), especialmente en la administración de los recursos.

“La pregunta es ¿Quién asume estas deudas impagables?, ¿Es justo que los balances de los hospitales públicos tengan que ser castigados, generando malas calificaciones por gestión administrativa, por culpa de la irresponsabilidad de las EPS, por el no pago de las facturas?”, advirtió Zuluaga.

Aunque ambos manejan fondos públicos, diversos decretos y resoluciones expedidos por gobiernos anteriores han favorecido a las EPS en detrimento de los prestadores estatales, lo que ha generado descontento y críticas por parte de los hospitales públicos.

Uno de los principales problemas denunciados por los hospitales es la utilización de tácticas por parte de las EPS para retrasar el pago de facturas, utilizando glosas como una forma de envejecer las carteras, lo que convierte estas deudas en difíciles de recaudar. Esta situación plantea interrogantes sobre quién debe asumir estas deudas impagables y si es justo que los hospitales públicos sean penalizados en sus balances y calificaciones debido a la irresponsabilidad de las EPS en el pago de facturas.

Olga Lucía Zuluaga también puso en evidencia que muchas negociaciones de contratos entre EPS y hospitales públicos violan las normas, imponiendo incrementos por debajo del Índice de Precios al Consumidor (IPC). Esto, sumado a los problemas financieros que enfrentan muchos hospitales públicos, ha llevado a intervenciones y liquidaciones de estas instituciones, lo que plantea un panorama sombrío para la prestación de servicios médicos de calidad en el país.

La deuda total de estas tres EPS con los hospitales públicos se cifra en $346.596 millones, y se suma a la cartera pendiente con otras EPS, alcanzando la cifra alarmante de $7.8 billones. Este panorama complejo destaca la necesidad de abordar de manera integral los desafíos estructurales en el sistema de salud colombiano, garantizando una distribución equitativa de los recursos y una gestión más transparente y responsable por parte de las EPS, en beneficio tanto de los afiliados como de los prestadores de servicios de salud.

¿Qué pasó con los 10 billones?

Bajo un ambiente de moderado optimismo finalizó la segunda reunión prevista entre el Gobierno Nacional con los representantes de las entidades promotoras de salud, EPS, en el país, que contó con el acompañamiento de la Defensoría del Pueblo, realizada el pasado martes.

Acemi hizo una aclaración respecto al supuesto giro de 10 billones de pesos por parte del Gobierno Nacional para el funcionamiento de las EPS Sura, Sanitas y Compensar hasta fin de año: “No es cierto que el Gobierno vaya a entregarles a todas las EPS —o a algunas de ellas— recursos adicionales a los que viene girando, mes a mes, por concepto de Unidad de Pago por Capitación (UPC)”.

En esa misma línea, el ministro de la salud, Guillero Jaramillo, aseguró, en medio de la polémica por la crisis económica de las EPS, que “a Sanitas, Sura y Compensar se les han girado más de 14 billones de pesos al mes de julio y les vamos a girar otros 10 billones de pesos más si continúan atendiendo a los pacientes, y si no los atienden no podemos seguir girándoles. Cómo continuarán atendiendo a los pacientes, les vamos a girar mensualmente todos los requerimientos”.

Desde Acemi indicaron, sin embargo, que, el ministro Jaramillo, “se refiere a la continuación del pago a las EPS por el valor que el Gobierno ha estimado para cubrir la UPC; sin embargo, ese monto es justamente centro de las conversaciones que se instalan esta semana con el Ministerio de Salud y demás actores del Sistema”.