Transporte
Se alista para despegar y luego acuatizar la primera aerolínea de hidroaviones del país
Los vuelos iniciales serían en agosto o septiembre de este año y arrancarán operaciones en la costa Caribe.

La aviación colombiana se alista para volver a sus inicios, pues cuando esta actividad arrancó en el país, en 1920, lo hizo con hidroaviones que podían acuatizar en el río Magdalena, y ahora la aerolínea Alma planea traer ese tipo de aeronaves para desarrollar un nuevo negocio aéreo en este mercado.
Detrás de Alma Air está Irelandia Aviation, empresa especializada en el desarrollo de aerolíneas de bajo costo, como Ryanair y la finada Viva Air. Esta vez, sin embargo, no les apuestan a los viajes baratos, sino a atender la creciente demanda de viajeros que tiene Colombia, los cuales quieren conocer muchos destinos a los que solo se puede llegar por carretera o en lancha.
El británico Rupert Stebbings, quien lleva 20 años en Colombia, es el CEO de Alma Air y explica que la geografía del país es perfecta para los hidroaviones, ya que cuenta con 20.000 kilómetros de ríos, 3.000 lagos o ciénagas y dos costas. Si bien la aviación en el país inició con ese tipo de aeronaves, ya hoy no se usan por falta de regulación.
Desde 2020, los accionistas de Alma Air iniciaron las exploraciones con la Aerocivil para poder operar en el país, pero la llegada de la pandemia retrasó sus planes. No obstante, retomaron su proyecto hace año y medio con el convencimiento de que muchas zonas de Colombia están desconectadas y necesitan servicios de hidroaviación.
Lo más leído

Su plan es iniciar con aviación comercial de pasajeros en una especie de vuelos chárter o aerotaxis. Para eso contarán con dos aviones Cessna Grand Caravan, cada uno con capacidad para ocho pasajeros. Su primera base será Cartagena, donde hay mucha demanda para transportar turistas a zonas como las islas de San Bernardo o Múcura. De la capital de Bolívar hacia esos destinos se mueven 40.000 pasajeros por año en lancha, en trayecto que toma más de dos horas, quienes muy probablemente estarían dispuestos a pagar más por llegar más rápido. La misma idea tendrían aquellos que viajan por tierra de Cartagena a Mompox, lo que toma de cinco a seis horas, mientras que en avión son 25 minutos.
“Muchos de los turistas que están llegando del exterior y que tienen una o dos semanas para conocer Colombia, tienen que hacer su tiempo lo más eficiente posible y no pueden gastar tantas horas en carro o en lancha”, explica Stebbings, quien anteriormente trabajó promoviendo el mercado de valores nacional.

En su concepto, los hidroaviones se ajustan también a los planes del Gobierno de promover el turismo en zonas alejadas del país, que no tienen suficiente infraestructura de carreteras, pero sí cuentan con ríos o lagos.
Este tipo de aviación es muy popular en zonas como Alaska, Bahamas, Maldivas, Vancouver o en Brasil. En este país, por ejemplo, en la ciudad de Manaos hay dos hidroaviones que sirven para el turismo en el Amazonas y que se podría replicar acá en Leticia.
El proceso de Alma Air ante la Aerocivil está en una etapa avanzada. Sin embargo, aunque inicialmente se esperaba iniciar operaciones durante Semana Santa de este año, ahora se proyecta que el vuelo inaugural podría realizarse en agosto o septiembre. La demora se debe a la ausencia de regulación, que aún está en proceso de elaboración. Una de las principales inquietudes radica en el impacto ambiental de los acuatizajes; no obstante, Stebbings argumenta que un hidroavión genera significativamente menos contaminación que las miles de lanchas a diésel que recorren los ríos y mares del país.
“Las cifras de turismo están desbordadas y muchos colombianos y extranjeros están buscando destinos nuevos o experiencias distintas y esta aviación es una gran oportunidad”, explica el ejecutivo, y dice que además de la costa Atlántica ya han tenido llamados de Guatapé en Antioquia y de los Llanos Orientales, que quieren que establezcan rutas con sus hidroaviones.