Economía
“Desde la lógica es imposible que la izquierda pueda tener la misma votación que en 2022″: Daniel Velandia, experto de Credicorp
Los temas de salud y seguridad serían parte del ‘castigo’ que impondrían los electores al partido político del actual gobierno. Mercados, expectantes.

Aunque muchos prefieren pasarlo por alto, la política va de la mano de la economía y los mercados están en vilo, por lo que sucederá de acá a las elecciones de Colombia en 2026, cuando habrá comicios para elegir Congreso de la República y presidente de la nación.
Daniel Velandia, durante la Investor Conference que se realiza en Chile, dibujó el panorama de lo que están viendo como analistas, pues dichas proyecciones son claves para los inversionistas, quienes toman sus decisiones -de poner o no recursos en nuevas apuestas en el país-, a partir de las estimaciones que se realizan en relación con lo que podría pasar en materia política.
Tres países de la región coincidirán en elecciones
Tres países de América Latina, por primera vez, coinciden en el hecho de tener elecciones, para un posible cambio de mando, en vista de las dificultades que han tenido los actuales mandatarios: Chile, Perú y Colombia.
En el caso colombiano, con base en los sondeos existentes, Velandia estima que sería poco probable que la izquierda logre tener la misma votación obtenida en 2022, cuando el presidente Gustavo Petro logró poner por primera vez un gobierno que se ubica en el espectro político defensor del igualitarismo y en contraposición a la línea política que hasta el momento había permanecido en Colombia.

Los seguidores de la izquierda están donde la violencia se ha recrudecido
Velandia, para sustentar sus argumentos, recordó que en las más recientes encuestas aplicadas en el país, hay un 26 % de la población que quiere que el próximo presidente continúe con las políticas del presidente Petro. Sería aproximadamente el mismo porcentaje de la izquierda dura colombiana de toda la vida, lo que implica que lo hecho en el mandato no ha ganado cifras. En ese sentido, el panorama para ir más allá de ese porcentaje estaría difícil, señala el experto. Principalmente, por el alto deterioro en dos temas altamente sensibles para la población: la seguridad y la salud.
Si bien Colombia ha sido por muchos años un país de violencia, hacía 30 años que no mataban a un candidato a la presidencia como ocurrió con Miguel Uribe Turbay, un hecho que quedó haciendo eco y que seguramente tendrá peso en las decisiones durante las elecciones.
El mapa de las áreas geográficas más afectadas por la violencia están justamente donde se venía posicionando la idea de una continuidad de la izquierda en el poder; mientras que el descontento con la salud es un asunto más generalizado, pues, “el sistema ha implosionado”, manifestó Velandia.