Finanzas
En Nueva EPS había deudas acumuladas y sistemáticas que la llevaron a una espiral compleja. SuperSalud, en entrevista con SEMANA
Estaría próxima a iniciar la auditoría forense que se ha anunciado. Giovanny Rubiano cuenta que la información de esta EPS, reportada a la entidad de vigilancia, no correspondía a la realidad financiera de la empresa. Había un patrimonio negativo superior a los $471.000 millones en 2023.

SEMANA: ¿Cómo recibe el informe de la Contraloría, el cual destapa un verdadero despelote en la Nueva EPS?
Giovanny Rubiano: Los hallazgos de la Contraloría no son nuevos. En el proceso de intervención, el equipo técnico de la superintendencia estableció cómo en la vigencia 2023 se ocultaron hechos económicos que eran relevantes y que cambiaron el resultado de los indicadores de permanencia de la Nueva EPS.
En visitas de campo y seguimiento a esta EPS, hemos encontrado debilidades en los procesos; contratos sin legalizar; cuentas médicas por soportar.
Estos hallazgos y otros más han sido motivo para la intervención y la medida cautelar que impuso esta superintendencia recientemente. Desde agosto se adelanta un plan de trabajo que busca estabilizar los giros, organizar las redes de prestadores, tanto públicos como privados, y regularizar los pagos.

SEMANA: ¿En dónde se genera el principal hueco financiero de la Nueva EPS?
G.R.: La información de esta EPS reportada a la SuperSalud no correspondía a la realidad financiera de la entidad.
Había un patrimonio negativo superior a los $471.000 millones en 2023 y obligaciones pendientes por pagar muy superiores a las que habían sido informadas.
Al momento de la intervención, la Nueva EPS presentaba obligaciones pendientes de pago por casi 3 billones y realmente eran superiores a los 8 billones, es decir, más de 5 billones sin reportar.
Se ha recomendado a todas las EPS bajo intervención que fortalezcan las auditorías a las cuentas médicas y realicen una auditoría forense. Esta última nos permitirá conocer el destino de los recursos, aclarar las posibles inconsistencias financieras y determinar las responsabilidades.
En este momento, Nueva EPS está próxima a iniciar ese proceso, que ya empezaron Savia Salud, Famisanar y Coosalud.

Sobre demora en la atención
SEMANA: ¿Qué podrían decirles a los afiliados que piden cita y les responden que no se las asignan porque la EPS no ha pagado?
G.R.: Es importante aclarar que la Nueva EPS tiene deudas acumuladas y sistemáticas que han conducido a una espiral compleja al principal pagador del sistema de salud colombiano. Por una parte, debe mantener el flujo de recursos existentes para garantizar la atención y prestación de servicios de sus 11,7 millones de afiliados. Y, por otra, debe hacerlo en medio de los retos que implica ordenar y vigilar los pagos a cerca de 2.500 proveedores de servicios y tecnologías en salud.
Todo, en medio de las debilidades identificadas en los procesos contables, tecnológicos y del talento humano, que afectan estructuralmente la gestión de la EPS, aun en esta vigencia. A eso hay que sumar, que Nueva EPS maneja un presupuesto mensual de 2 billones de pesos, y en donde los prestadores, no todos, recurren a mecanismos que van desde el cierre de servicios hasta embargos de la UPC para reclamar el pago de las deudas.
Para este superintendente, retener el flujo de recursos, mientras se ordena la casa, es inconveniente porque afecta la atención de miles de afiliados, que es lo que estamos buscando mitigar.
El mensaje entonces es de confianza a los usuarios. La Supersalud está vigilando que se mantenga la prestación de los servicios, sin interrupciones.

¿Ha servido la intervención estatal?
SEMANA: ¿De qué le ha servido a la entidad pasar a control estatal?
G.R.: La EPS ha puesto en marcha planes de trabajo enfocados en reflejar su situación financiera, legalizar anticipos, formalizar la relación con la red prestadora y proveedora de servicios y tecnologías en salud, garantizar la atención a sus afiliados e implementar mejoras tecnológicas para superar la grave obsolescencia de sus sistemas de información, entre otros aspectos.
Por ejemplo, durante la intervención se incrementó el proceso de radicación de facturas pendientes por procesar, pasando de un promedio de 35 millones de facturas al mes. Todo esto de manera manual, procesando facturas que no estaban debidamente registradas.
Al inicio de la intervención, el represamiento de cuentas médicas acumulaba la suma de 4,3 billones de pesos y con corte a julio de 2025, la EPS ha avanzado en un 50,8 por ciento en la depuración de ese monto.
También se han instaurado procesos para la auditoría de cuentas médicas y de radicación de facturas, con el apoyo de cinco operadores contratados para ese fin, dadas las debilidades tecnológicas de la EPS. Esto, para mencionar solo unas acciones emprendidas.

Explica lo que quiere el presidente Petro
SEMANA: ¿Tiene salida la crisis de la Nueva EPS si el presidente Petro dice que no va a salvarlas más?
G.R.: El presidente señala que gran parte de las deudas acumuladas y el bajo cumplimiento de los habilitadores financieros por parte de estas EPS se deben a la ineficiencia en el manejo de los recursos y a su uso indebido. Por ello exige que sean los dueños quienes respondan por esos pasivos, y que no se cubran con los recursos públicos destinados a la salud de los colombianos.