Macroeconomía
La confianza del consumidor en EE. UU. se sigue deteriorando: ¿estragos de la desaceleración?
Autoridades económicas de este país lanzaron duras advertencias al mundo financiero.
La confianza de los consumidores en la economía de Estados Unidos registró en abril un descenso mayor al esperado, en particular el dato a mediano plazo afectado por temores de recesión, de acuerdo con el índice publicado este martes 25 de abril por la organización Conference Board.
De acuerdo con los reportes entregados en el arranque de la jornada, el índice general cayó a 101,3 puntos, frente a 104 puntos en marzo, muy por debajo de los 104,1 esperados por los analistas, según el consenso reunido por briefing.com.
Una dura advertencia económica
Esta información sin duda aumenta los temores frente a lo dicho horas antes por la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, quien alertó que un incumplimiento del pago de la deuda de Estados Unidos desencadenaría una “catástrofe económica y financiera”.
La funcionaria del gobierno de Joe Biden enfatizó en declaraciones preparadas para un evento en Washington que un aumento o la suspensión del límite de endeudamiento de Estados Unidos -un paso necesario para evitar un default-, debería darse “sin condiciones” por parte del Congreso. La oposición republicana exige un drástico recorte del gasto público para proceder a aumentar este techo de emisión de deuda.
Tendencias
Los republicanos pretenden impulsar una votación esta semana sobre este asunto. Estados Unidos alcanzó en enero su límite de endeudamiento de 31,4 billones de dólares, lo cual llevó al Departamento del Tesoro a tomar medidas extraordinarias que le permitan continuar financiando las actividades del gobierno.
Pero si el Congreso no eleva o suspende el techo de la deuda antes de que se agoten las herramientas actuales, el gobierno de Biden corre el riesgo de incumplir las obligaciones de pago a partir de julio, con profundos efectos para la economía estadounidense y mundial.
“En mi evaluación, y la de los economistas en general, un incumplimiento de pago de nuestra deuda produciría una catástrofe económica y financiera”, señaló Yellen el martes, quien agregó que de ocurrir un default, aumentarían los pagos de las cuotas de hipotecas, de préstamos para compra de automóviles y por tarjetas de crédito, mientras que las empresas podrían ver empeorar las condiciones crediticias.
El gobierno federal también podría volverse incapaz de realizar pagos a millones de estadounidenses, incluidos aquellos que dependen del Seguro Social.
Noticias agridulces en vivienda y desempleo
Por otra parte, las ventas de viviendas nuevas en Estados Unidos volvieron a subir en marzo respecto de febrero, por segundo mes consecutivo, según datos divulgados el martes por el Departamento de Comercio.
Unas 683.000 propiedades fueron adquiridas en proyección anual (la cifra a 12 meses si se mantuvieran las condiciones al momento de la medición). Se trata de un alza de 9,6 % con relación al dato de febrero. El volumen de transacciones es, de todos modos, sensiblemente inferior al registrado hace un año.
Los analistas esperaban una caída de las ventas a 630.000 unidades, según el consenso reunido por briefing.com. El alza debería “continuar en los próximos meses”, según el economista principal de Pantheon Macroeconomics, Kieran Clancy, en parte porque “los precios de las casas nuevas deberían bajar más rápido que el de la vivienda usada para reducir los stocks disponibles”.
Por último, hay que destacar que el conglomerado industrial estadounidense 3M, que produce desde equipamiento médico hasta cintas adhesivas o post-it, anunció nuevos despidos masivos este martes, al publicar sus resultados trimestrales.
3M informó de “acciones de reestructura” que afectarán a “todas las funciones, todas las actividades y las zonas geográficas, e impactarán en unos 6.000 puestos” de trabajo adicionales a “la reducción de los 2.500 puestos de producción anunciada en enero”, señaló el grupo en un comunicado.
A inicios de año la firma anunció que esperaba dificultades económicas en 2023. Según 3M, los despidos permitirán ahorrar entre 700 y 900 millones de dólares. A finales de 2021, la empresa empleaba a unas 95.000 personas.
La facturación de 3M bajó 9 % en el primer trimestre de 2023, sobre igual período de 2022, a 8.000 millones de dólares, por encima del consenso de los analistas reunido por Factset. La ganancia por acción, en tanto, cayó, a 1,97 dólares, de todos modos por encima de lo esperado por el mercado. El grupo mantuvo su perspectiva de un descenso de ventas de 2% a 6% en 2023 y una ganancia por acción entre 8,5 y 9 dólares.
*Con información de AFP.