Guillermo Valencia Columna Semana

Economía

La burbuja que está colapsando no es tecnología, es la globalización y los bonos del Tesoro

Este es un mercado lleno de contradicciones.

Guillermo Valencia
15 de enero de 2025

El mercado siempre ha sido un espejo de nuestras narrativas, un reflejo de nuestras creencias y, muchas veces, de nuestras ilusiones. Hoy, ese espejo está resquebrajado. Estamos presenciando el colapso de una de las mayores certezas financieras de las últimas décadas: la burbuja de la globalización y el mito de los bonos del Tesoro de Estados Unidos como activos libres de riesgo.

Desde octubre de 2022, los bonos del Tesoro han perdido un 50 % de su valor, desmoronando la narrativa que los convertía en el pilar de la estrategia financiera global. Durante años, la globalización fue el eje que guiaba la asignación de recursos, con los bonos del Tesoro como columna vertebral y el modelo 60/40 como fórmula mágica para gestionar portafolios. Pero hoy, ese modelo tambalea.

Las tasas de interés, que han alcanzado el 4.7 % en los bonos a 10 años, han sacudido los fundamentos del mercado. Las consecuencias son palpables:

  • Presión en mercados emergentes: Las monedas de economías rezagadas se están devaluando rápidamente.
  • Crisis en empresas zombis: Compañías altamente endeudadas enfrentan un entorno cada vez más hostil.
  • Fragilidad bancaria: El sistema financiero global podría estar en riesgo si estas tensiones escalan.

Este es un mercado lleno de contradicciones. Las tasas altas podrían obligar a la Reserva Federal a recortar en el corto plazo para estimular la economía, pero al mismo tiempo, los motores inflacionarios a largo plazo, impulsados por la transición geopolítica y energética, siguen encendidos.

Un nuevo paradigma: Tecnología, energía y liquidez

En este entorno, la pregunta no es cómo diversificar, sino cómo asignar recursos de manera estratégica e inteligente. Tres pilares fundamentales emergen para navegar esta transición:

  1. Tecnología: Desde 2020, ha sido el motor del crecimiento. Aunque algunas empresas como Nvidia pueden estar sobrevaloradas, actores como Taiwan Semiconductor y Broadcom son fundamentales para la transformación digital.
  2. Energía: La electrificación está redefiniendo las prioridades globales. La transición energética será clave para las naciones que quieran liderar en esta nueva era.
  3. Liquidez como herramienta táctica: En un entorno donde la volatilidad es la norma, mantener una posición de cash no es defensa, sino agilidad. La liquidez permite actuar con rapidez en momentos de corrección del mercado.

Lecciones de las burbujas: Adaptarse o desaparecer

Howard Marks nos recuerda que las burbujas no terminan cuando los precios son altos, sino cuando la liquidez se agota. Sin embargo, nuestra tesis indica que la liquidez sigue creciendo, especialmente en sectores como la tecnología, alimentando nuevas narrativas y oportunidades.

En este contexto, los inversores que sepan adaptarse y mantengan una estrategia disciplinada tendrán ventaja. La volatilidad no es el enemigo; es el precio que pagamos por las mejores oportunidades.

Construyendo el futuro en tiempos de incertidumbre

Estamos en un punto de inflexión histórico. Las monedas de los países que no se adaptan están cayendo, y los inversores que permanecen inmóviles están perdiendo la oportunidad de capturar el cambio estructural.

La inacción no es una opción. La incertidumbre, lejos de ser un obstáculo, es el terreno donde se construye la riqueza futura. Con tecnología, energía y estrategias disciplinadas, podemos liderar el cambio hacia un mundo que está redefiniendo sus reglas.

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