AHORRO
Así es el método del ‘ayuno financiero’ para poder llegar a fin de mes
Hacer rendir la plata es la preocupación de cientos de colombianos cada día.
Cuando se acerca el fin de mes y toca estirar el salario por unos días más, hasta cinco mil pesos son valiosos. Hoy en día son cientos los hogares colombianos que lidian con este desafío de hacer rendir el dinero lo suficiente para cumplir con todas sus obligaciones mensuales.
Aunque parece tarea imposible, muchos lo logran, precisamente ajustando el bolsillo y evitando gastar más de lo estrictamente necesario. Una técnica muy similar al conocido método de ahorro del ‘ayuno financiero’, el cual consiste en un plan estricto en el que se cortan algunos costos del presupuesto por un tiempo para equilibrar las finanzas.
Según explican en un artículo de Business Insider, este truco fue expuesto por Michelle Singletary en su libro El ayuno financiero en 21 días: tu camino hacia la paz y la felicidad financiera, por su traducción al español. De acuerdo con la explicación recogida por el referenciado medio, esta técnica consiste en repetir durante dicho período de 21 días un ajustado régimen del ahorro para aumentar la fluidez en la caja personal.
En el largo plazo, el fin último de esta estrategia es lograr establecer una cultura del ahorro, lo cual permita contar con un dinero adicional para el desarrollo de las metas que son parte del proyecto de vida o en caso de algún imprevisto que demande de recursos extra para cubrirlo.
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La particularidad que diferencia a este método de otros está en que suele a ser catalogado como más restrictivo que otros más famosos, algo parecido a cuando el nutricionista le prohíbe ciertos alimentos a su paciente.
El portal de economía Oink Oink indica que lo principal es eliminar del presupuesto todos aquellos rubros que descuadran las cuentas y no tienen en realidad mucha utilidad, en términos sencillos: deshacerse de los gastos innecesarios. Para ello, la autora propone que las personas se limiten a utilizar sus recursos disponibles para costear las necesidades básicas, entendidas estas como alimentación, vivienda, salud, servicios públicos... solo los que son indispensables.
Entrar en el ‘modo supervivencia’ dicen algunos. El éxito de este método está en que se repita el ejercicio durante 21 días, más o menos tres semanas, con el fin de que se convierta en un hábito. Lo anterior se justifica en que varios expertos han señalado ese período como el necesario para que una acción se vuelva parte de la rutina cotidiana de las personas.
Otra de las recomendaciones que entrega la creadora de esta estrategia es hacer todas las compras en efectivo. El uso de los plásticos a veces puede dar la percepción de que ese dinero ‘no se va’ aunque se esté descontando de las cuentas bancarias o se sumen a la cuota de la tarjeta de crédito.
En cambio, al ver el dinero y entregarlo a manos de otro se evidencia de forma tangible cómo se va la plata, por lo que, de acuerdo con la autora, se es más consciente del gasto del salario y puede ayudar a controlar mejor el gasto.
De gran importancia resulta, además, llevar registro de todos los gastos que se realizan durante el período del método para así, al final del desafío, evaluar si se cumplió con el cometido y en qué se utilizaron los recursos.
Para ello puede ser útil hacer uso del presupuesto, una herramienta en la que se puede consignar el detalle de los ingresos y egresos, para también organizar las finanzas para el mes entrante.
No está de más aclarar que el dinero restante luego de culminar el reto debe ser destinado para el ahorro, el cual irá creciendo a medida que se acostumbre y acoja la práctica con naturalidad.