Fiestas que violen las reglas de convivencia podrían acarrearle grandes multas económicas

En estas épocas de final de año las tradicionales, fiestas de disfraces, novenas, rumbas o buñueladas son muy características entre las personas que desean festejar las últimas festividades del año.

Pero no todas las personas están dispuestas a disfrutar de los alegres momentos y soportar las alteraciones de convivencia.

Por tal razón, si usted hace parte de un conjunto residencial o una propiedad horizontal, tiene que tener en cuenta algunas medidas para evitar pasar un mal momento que su bolsillo sufre las consecuencias de esos minutos de celebración.

Por reglamento de las propiedades horizontales, que rigen a la mayoría de administraciones en el ámbito local y nacional, usted está en todo su derecho de organizar reuniones en su vivienda desde cuando estas no afecte a los demás residentes del lugar.

Usted podrá anunciarle a la administración o solicitarle un permiso para las reuniones que llevará a cabo, dándole detalles del número de personas que asistirán, el tipo de actividades que usted tendrá y la hora máxima para la finalización de las fiestas.

Pero ojo, si ustedes exceden el nivel de ruido o realiza acciones fuera de los espacios señalados, la administración de su edificio o unidad residencial le pueden imponer multas que usted deberá pagar con la siguiente cuota de administración.

Estas multas deberán ser fijadas en el reglamento interno de los copropietarios y usted tendrá pocas oportunidades para no dar cumplimiento a estas sanciones.

Si no fuera suficiente con molestar a sus vecinos y ver su bolsillo seriamente afectado en esas épocas decembrinas la administración está en su derecho de pedir apoyo policial, ya sea a la unidad del sector o entidades calificadas para el proceso en este usted podrá recibir una serie de multas adicionales por alteración a la tranquilidad, contaminación auditiva o irrespeto a la ley por 400.000 mil pesos.

Además, tener en cuenta si sus vecinos cuentan con la presencia de adultos mayores, niños o personas que presenten alguna discapacidad o estén realizando algún tratamiento médico que requiera de un espacio de calma y tranquilidad.

Si ese es el caso, se recomienda: o no realizar estas celebraciones en su propiedad o buscar la manera de que sus acciones no afecten a dichas personas, ya que estas tienen prioridad y usted podría acarrear sanciones mayores o procesos judiciales en su contra que le dañen el inicio del nuevo año.

En estos meses finales las administraciones de las copropiedades realizan las juntas de propietarios en las cuales se busca la elección o la ratificación de los administradores para que eso representen a sus vecinos frente a las autoridades locales y nacionales. Esto con la idea de tener participación en las reuniones que realizan las alcaldías para el desarrollo de los PMU y las obras que se adelantan en las ciudades capitales del país.

En otros casos algunas alcaldías locales no imponen multas económicas, sino que aplican multas educativas en las que usted tendrá que ir a cursos de capacitación en donde se le enseñará el respeto por sus vecinos o podrían imponerle horas de sanción de trabajo social en los cuales optaría por ayudar a comunidad vulnerable para no volver a cometer los actos que lo llevaron a dicha situación.

Aunque usted no lo crea, muchos de los inconvenientes entre vecinos han terminado en demandas judiciales en las cuales La Fiscalía tienen que entrar a mediar entre los copropietarios de las unidades residenciales y así evitar males mayores.