PENSIONES
Pensiones para mujeres de más de 40 años: esta sería la nueva realidad que plantea la reforma
Pasar de tener que cotizar 1.300 a 1.000 semanas es un cambio del cielo a la tierra.
De tener que cotizar 26 años en promedio, las mujeres pasarían a solo 19 o 20 años para obtener una pensión, según incluye la reforma pensional, proyecto de ley que tiene un artículo con el cual se busca ‘hacer caso’ a un mandato de la Corte Constitucional, que ordenó que las mujeres que cotizan en fondos privados puedan pensionarse con 1.000 semanas.
En la actualidad, las normas señalan que, en Colpensiones, se requiere un mínimo de 1.300 semanas cotizadas y una edad diferencial: 57 años las mujeres y 62 años los hombres.
En ese contexto, hay múltiples aristas para las pensiones de las mujeres, teniendo en cuenta que las reglas existentes tienen otro bemol: la tasa de reemplazo, es decir, la plata real que va a recibir el jubilado en comparación con el ingreso que tenía como trabajador, se calcula con el sueldo recibido en los diez últimos años de trabajo y, en promedio, es del 65 %, partiendo de la idea de que una persona en su momento de retiro laboral ya no tiene tantas responsabilidades como en sus años de juventud y madurez.
Así las cosas, las mujeres, en muchos casos, quedan con ingresos inferiores en comparación con los hombres, por lo que algunas optan por extender la vida laboral, ya que si suman más semanas pueden aspirar a aumentar un poco más el porcentaje que recibirán, el cual, no obstante, no puede sobrepasar el 80 % del ingreso promediado en una década.
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En otras palabras, las mujeres, en materia pensional, al igual que en el ingreso salarial y el acceso al mercado laboral, han estado en desventaja.
La reforma pensional que hace trámite en el Congreso de la República y que durante la semana pasada no pudo ser debatida en los estrados legislativos, por falta de cuórum, se metió con el tema.
De aprobarse, las mujeres pasarán a pensionarse con 1.000 semanas, lo que llevaría a que, si hoy trabajan hasta los 57 años para completar 1.300 semanas en Colpensiones (en los fondos se pueden pensionar con 1.100 semanas, pero han existido sendas demandas por los montos que les plantean a quienes cotizaron en el aseguramiento privado), se les reducirían 300 semanas, que equivalen a una disminución de casi seis años.
De por medio está una sentencia de la Corte, en el que se argumenta que las reglas de juego que ponen a la mujer en el mismo nivel de exigencia que los hombres, a fin de lograr una pensión, “ignora las prácticas y escenarios de discriminación estructurales en el mercado laboral a las que históricamente se han enfrentado, las cuales han obstaculizado que puedan efectuar cotizaciones al sistema y, en consecuencia, cumplir con la densidad de semanas exigida para acceder a esta garantía”.
Hay que señalar que la sentencia emitida por el alto tribunal da un tiempo, hasta 2026, para que se regule lo pertinente a las semanas de las mujeres. De no hacerlo, se aplicará la disminución gradual siguiente: a partir de 2026, el requisito baja 50 semanas, y cada año 25 hasta llegar en 2036 a 1.000 semanas.
Adicionalmente, sigue vigente la idea de disminuir 50 semanas por cada hijo, hasta un máximo tres, lo que implica que las mujeres podrían acceder a una pensión con alrededor de 850 semanas.
Pero ¿y la edad?
Alrededor de la reforma pensional tendrán que venir debates técnicos. En el caso de las mujeres, con las cuentas existentes, tendrían que pensar desde los 40 años, y no desde los 47 como en la actualidad, lo que más les conviene.
Pero eso sí, como se trata de un camino reformista que apenas se empieza a recorrer, hay expertos que dejan en el ambiente el interrogante de las 1.000 semanas, pero ¿y la edad? Hasta el momento, lo que han escuchado los colombianos alrededor de la reforma es que no se mueven las edades de pensiones.
En algunos pronunciamientos, la Ocde fue partidaria de, por el contrario, equiparar la edad de la mujer con la del hombre a la hora de pensionarse, para evitar esa distancia tan grande en el ingreso que recibe uno y otro al momento del retiro laboral. Esto teniendo en cuenta que, a menor tiempo de cotización, menores ingresos.
Así que, por ahora, las cuentas aún están por verse.