Alci Acosta
Alci Acosta ha construido una carrera en la que no han faltado los grandes éxitos: La copa rota, Si hoy fuera ayer, La cárcel de sing sing y Traicionera. | Foto: Foto: Carlos Cruz

Música

Alci Acosta se despide de los escenarios; así será el último concierto del mítico cantante colombiano

El cantante de Soledad, a sus 84 años, deja una carrera de medio siglo dedicada a preservar el bolero entre las nuevas generaciones.

26 de septiembre de 2023

Este 1 de diciembre, los bogotanos podrán ser testigos de la despedida de uno de los más grandes artistas de Colombia: Alci Acosta.

Su infancia la vivió en Soledad, Atlántico. Luego se trasladó a Barranquilla, donde estudió piano y luego empezó a trabajar como pianista en varias orquestas locales. Su carrera como solista arrancó en 1965 cuando grabó su primer sencillo Odio gitano, composición de Cristóbal Sanjuán.

El maestro colombiano Alci Acosta, uno de los exponentes más importantes del bolero de todo el país. | Foto: Especial para El País

Desde entonces, ha construido una carrera en la que no han faltado los grandes éxitos: La copa rota, Si hoy fuera ayer, La cárcel de sing sing y Traicionera.

Años más tarde tiene la oportunidad de grabar a dúo con el ecuatoriano Julio Jaramillo y Olimpo Cárdenas varias canciones, entre las cuales tenemos otra versión de Odio gitano y Dos rosas. Hizo varias giras al exterior, en las cuales visitó países como México, Venezuela, Perú y Ecuador, donde es recordado con gratitud por grabar con Julio Jaramillo la canción Odio Gitano.

En una entrevista reciente con SEMANA, este soledeño confesó que completaba más de 58 años cantando. “Y al comienzo estaba convencido de que mi público era gente madura, más o menos de 40 años para arriba, 50 o 60 años. Pero, tiempo atrás, hará más o menos unos 15 años, descubrí que me salió una nueva fanaticada de gente mucho más joven, de entre 15 y 25 años. Muchachos que conocen mi música, que se la saben de memoria. En mis presentaciones las cantan conmigo, disfrutan mucho lo que yo hago. Y hasta niños me siguen. Me pasó en Cartago, con un chico de 9 años que subió a la tarima y se sabía mis canciones. Y en España, una pequeña de 8 años cantó conmigo La copa rota. Creo que esta generación hará que mi música perdure un poquito más, mis boleros están a salvo con estas nuevas generaciones”.

Andy, Harry y Kamy, cantantes de Los 50 de Joselito
Los 50 de Joselito | Foto: SUMINISTRADA A SEMANA

En este diálogo aseguraba que el suyo “es un despecho sofisticado y un despecho que les ha llegado a diferentes tipos de personas. Gente humilde, gente del común, gente clase media y también gente rica; entonces mi piano y yo hemos conquistado a miles, sin distinguir clases sociales y tampoco edades”.

Y aseguró que el bolero, ritmo del que ha sido uno de sus más grandes intérpretes en Colombia, sigue vigente gracias a que “la música romántica, lo que llamamos hoy en día de despecho, tiene muchos fanáticos. Ahora estoy convencido de que el bolero no va a pasar nunca de moda. Hoy en día, lógicamente, tenemos la invasión y la aceptación de la música popular en diferentes generaciones jóvenes y mayores. Gracias a Dios, para nosotros los cantantes de música popular tenemos una fanaticada fiel que va a perdurar por muchos años”.

El próximo 1 de diciembre en la Gran Carpa de Corferias en Bogotá se llevará el Concierto de Fin de Año.
La fiesta de fin de año 2023. | Foto: Ricardo Leyva Producciones

Pues bien, este 1 de diciembre, el maestro se despide de los escenarios en la Fiesta de Fin de Año 2023 en la Gran Carpa de Corferias en Bogotá.

De este mismo espectáculo harán parte, desde Cuba, la legendaria Sonora Matancera. Junto a ellos, Los Corraleros de Majagual, Los Melódicos, Los Hispanos, Los 50 de Joselito, La Sonora Dinamita y los Latin Brothers.

Todos ellos estarán junto a Alci Acosta, que a sus 84 años deja una impronta imborrable para la música en Colombia: “Me gusta dejar claro que lo mío no es un despecho tan agresivo, ni con canciones hirientes. Y por eso, gracias a mi voz y a mi piano, he conocido muchos países. He estado 15 veces en Europa, cualquier cantidad de veces en Estados Unidos, a Ecuador voy todos los años; mi música me ha llevado también a Perú, a Canadá, a Centroamérica, especialmente a El Salvador. Así que gracias a esta voz, a este piano y a mis boleros tengo una fanaticada no solo en Colombia, sino en muchas partes del mundo”.