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Jennifer Lawrence: perdí el control en medio de Los Juegos del Hambre y la victoria en los Óscar
La actriz ganó el Óscar a mejor actriz en 2013.
La actriz y ganadora del Óscar Jennifer Lawrence confesó que “perdió la sensación de control” al principio de su carrera debido a su meteórico ascenso a la fama.
“Entre el estreno de Los Juegos del Hambre y la obtención del Óscar, me convertí en una mercancía tan grande que sentí que cada decisión era una gran, gran decisión de grupo”, dijo la actriz, de 32 años, durante una Screen Talk en el Festival de Cine de Londres el sábado.
Cabe recordar que para el año 2012, Lawrence debutó en la franquicia de Los Juegos del Hambre, que batió un récord de taquilla, teniendo a la actriz como protagonista principal de la trama.
Ese mismo año, la estrella de cine apareció junto a Bradley Cooper en la película de David O. Russell Silver Linings Playbook, que más tarde le valió su primera victoria en los Óscar en 2013.
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“Cuando reflexiono ahora, no puedo pensar en esos años siguientes, porque hubo simplemente una pérdida de control”, añadió Lawrence en el festival
A continuación, comentó sobre el hecho de ganar un Óscar a los 22 años: “Siempre pensaba ¿cuándo me llegará? No creo que lo haga nunca (...) Lo siento como algo personal por primera vez en mucho tiempo”, explicó la actriz de X Men.
La vida personal de Lawrence ha pasado por varios cambios importantes en los últimos años. La estrella de “¡Madre!” se casó con el galerista de Nueva York Cooke Maroney en 2019 después de una relación de alto perfil con el director Darren Aronofsky.
Desde entonces, la pareja ha dado la bienvenida a un niño, que nació en febrero.
Lawrence habló con Vogue para su portada de octubre de 2022 sobre cómo el hecho de ser madre podría afectar a sus papeles, diciendo: “He tenido un tema bastante consistente en todas mis películas desde que tenía 18 años. Tengo curiosidad por saber si, ahora que soy mayor y tengo un bebé, finalmente romperé con eso”.
Detalles de la boda de Jennifer Lawrence
Fue una ceremonia de bajo perfil, dado que ella, a pesar de ser una de las actrices más prestigiosas de la meca del cine de Hollywood, es muy sencilla, le rehúye a la ostentación y es celosa de su vida privada.
Su novio, por su parte, no tiene nada que ver con la farándula y, al igual que ella, no le gusta ser el centro de atención.
Fue algo tradicional, pero en una atmósfera relajada, en la que ellos compartieron su felicidad con sus familiares y amigos más cercanos. Asimismo, hay que recordar que por más bajo perfil a la boda asistieron personalidades y famosos.
Varia gente del espectáculo asistió y a la ceremonia fueron invitadas las actrices Emma Stone y Amy Schumer, las mejores amigas de Lawrence, al igual que la cantante Adele, quien fue la dama de honor para realizar la despedida de soltera de la novia.
Jennifer y su esposo se conocieron en 2018 a través de una amiga común, Laura Simpson, y, según le reveló una fuente cercana a la revista Page Six, del New York Post, la actriz está prendada de él porque la hace reír y no la trata como una celebridad, como lo hicieron otros novios, sino como una persona normal.