Kurt Cobain: ¿se suicidó o lo mataron?

En el último mes Cobain ha dado de qué hablar por varios motivos. Por supuesto, los 27 años de su desaparición, el 5 de abril, volvieron a poner en la páginas y pantallas de los medios la evocación de su trágica muerte. También salieron al mercado las fotos de la última sesión de fotos del cantante y una subasta especializada en el rock puso en remate seis hebras de su cabello, entre otras pertenencias.

Pero lo que pasó inadvertido es quizá lo más impactante: la desclasificación, por parte del FBI, del expediente del artista. Es la primera vez que el archivo se da a conocer y ha despertado alarma entre los periodistas y los millones de admiradores de Cobain, dado que podría remover el pasado dramáticamente.

De acuerdo con la revista Rolling Stone, el expediente es delgado –pues solo tiene diez páginas– pero su contenido es intrigante. Las piezas que más han causado sensación son dos cartas en las que se le pide al FBI que investigue el deceso del cantante como asesinato y no como suicidio. “A millones de fans alrededor del mundo les gustaría ver que se aclaren de una vez por todas las inconsistencias alrededor de su muerte”, se lee en una de las misivas, fechada en septiembre de 2003.

Entre los que dudan de la versión del suicidio, el firmante cita a Nick Broomfield, director del documental Kurt and Courtney. La otra nota fue escrita en 2007 y, al igual que sucede con la primera, el nombre del remitente fue tachado en el archivo. “El policía que tomó el caso nunca fue serio en investigar la muerte como un asesinato y desde el comienzo insistió en que fue suicidio”, dice el autor de la segunda nota, que continúa: “Esto me molesta porque su asesino anda suelto allá afuera”.

Este remitente también se refiere a aspectos que le parecen dignos de ser indagados, como el hecho de que no había huellas en el arma con la cual Kurt se mató. Así mismo, le parece sospechoso que en la supuesta nota de suicidio que el cantante dejó no hacía ninguna alusión al deseo de morir, excepto por la parte que fue escrita con otra letra y parece haber sido agregada, según informó Rolling Stone.

La respuesta del FBI debió ser decepcionante para sus corresponsales, ya que, aparte de agradecer su interés, les advierte que la mayor parte de las investigaciones por homicidio pertenecen a la jurisdicción de los estados o las autoridades locales. El FBI agregó en esas contestaciones que estaría en capacidad de ir más allá si hubiese tenido indicio de la violación de leyes federales, pero no fue el caso.

El archivo liberado también descubre que en el año 2000, seis años después de la muerte del cantante, la fiscal general de Estados Unidos de entonces, Janet Reno, se interesó por el asunto. Si bien no se dio a conocer la comunicación que ella le envió al FBI, sí aparece la misiva con que la principal entidad de investigación del país le respondió.

Como lo recordó la prensa estadounidense, cada cierto tiempo la oficina hace públicos archivos de personajes destacados de la política o el mundo del entretenimiento. Esa vez el turno fue para Cobain, en cuyo archivo también resulta intrigante el testimonio entregado por la empresa que produce la conocida serie Unsolved Mysteries, dedicada a crímenes sin resolver.

En 1997, los realizadores del programa le enviaron al FBI el testimonio de un investigador privado, Tom Grant (al parecer un pseudónimo), quien también encontró inconsistencias en la nota de suicidio que, en su concepto, era en realidad una carta que Cobain le dirigía a sus fans para anunciarles su retiro. Esto último a muchos no les suena descabellado, pues él siempre vivió en conflicto con la fama.

Rolling Stone comentó también que Cobain se une a la curiosa lista de músicos que han estado en la mira del FBI. Entre ellos figuran Robin Gibb, integrante de los Bee Gees, John Denver, los The Monkees y Notorious B.I.G. Cobain pertenece, además, al macabro “club de los 27”, como se ha llamado a un grupo de figuras del rock que han muerto a los 27 años, luego de alcanzar la gloria. Jimi Hendrix, Janis Joplin, Jim Morrison, Brian Jones y, más recientemente, Amy Winehouse, se cuentan entre las estrellas que comparten tan particular suerte.

Cuando murió, Cobain estaba fuertemente enganchado a la heroína y había tenido varias sobredosis de la misma. El 5 de abril, luego de varios días de divagar por Seattle, se inyectó una dosis triple de la droga y se pegó un tiro en la cabeza con una escopeta Remington calibre 22 que había comprado el año anterior para proteger a su familia.