Especial Hecho en Colombia
‘Ciudad dentro de la ciudad’, el concepto que gana fuerza en el sector de la construcción. ¿Qué tanto beneficia a las personas?
La constructora Amarilo lleva tres décadas trabajando por mejorar la calidad de vida de las familias colombianas en las 16 ciudades y municipios donde tiene presencia. La construcción sostenible ha sido la clave de su consolidación en el país.
El rol del sector de la construcción ha sido relevante para la economía colombiana, y más en los últimos años, en los que los esfuerzos estuvieron enfocados en la reactivación tras la pandemia. De acuerdo con Sandra Forero, presidenta ejecutiva de Camacol, las proyecciones y el comportamiento de la industria ratifican su capacidad para crear empleo, dinamizar la economía y generar bienestar para los colombianos por medio de la vivienda.
En ese marco, precisamente, Amarilo, reconocida por Merco como la constructora con mejor reputación del sector, continúa aportando al crecimiento y desarrollo del país e impulsando a más colombianos para que cumplan su sueño de tener vivienda digna. Hoy, tras 29 años de existencia, la constructora ha acompañado a 113.000 familias, que ahora cuentan con vivienda propia.
“En Amarilo tenemos la firme convicción de ser agentes de cambio. Nuestro propósito es aportar al desarrollo y competitividad de las ciudades, a través de la creación de espacios que ofrecen el equilibrio perfecto entre el diseño, la comodidad y el bienestar de todo un desarrollo sostenible”, explica Roberto Moreno, presidente de la compañía.
El gran sello de ese propósito ha sido el desarrollo urbano organizado y la construcción de comunidades mediante el concepto ‘Ciudad dentro de la ciudad’, que busca promover lugares con acceso integral a todo lo necesario: no solo vivienda, sino, además, comercio, entretenimiento, urbanismos generosos y acceso a servicios complementarios, como salud y educación.
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“Somos conscientes de que nuestro trabajo va más allá de construir proyectos urbanísticos. Por eso nos concentramos también en ser generadores de cultura ciudadana, impulsores de desarrollo y aliados del mejoramiento de las condiciones de vida de los colombianos. Queremos ser un agente de cambio que aporta al progreso del país, y por esto trabajamos en una estrategia de sostenibilidad integral que genera impactos positivos a nivel económico, social y ambiental en nuestro entorno”, agrega Moreno.
Ejemplo de eso es la inversión por parte de la compañía en iniciativas sociales, que en 2021 ascendió a 12.267 millones de pesos. Esto permitió avanzar en proyectos de beneficios comunitarios, escuelas de gestores, proyectos sociales y culturales, donaciones voluntarias y el Programa de Acompañamiento Social (PAS), cuyo objetivo es formar comunidades sostenibles y capaces de autogestionar sus necesidades.
“Para seguir consolidándonos como una empresa que deja huella y trasciende, seguiremos apostándole a transformar las regiones con urbanismos de calidad y construyendo comunidades empoderadas. Nuestro principal objetivo es transformar positivamente la vida de las familias colombianas a través de una mejor calidad de vida y la generación de bienestar con nuestros proyectos”, concluye el presidente de Amarilo.
En cifras
Los datos del Programa de Acompañamiento Social en 2021 de Amarilo:
- $1.067 millones de inversión
- 13.618 familias impactadas
- 54.472 usuarios del programa
- 7 agrupaciones sociales
- Capacitaciones en temas de seguridad, medioambiente, proyectos sociales, deportivos, culturales y emprendimiento
*Contenido elaborado con apoyo de Amarilo
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