Las claves del éxito del centro comercial más emblemático del suroccidente del país: “Hay que mantenerse firme en momentos complejos”

Liderar uno de los centros comerciales más emblemáticos del suroccidente colombiano no es una tarea menor, y Bibiana Barakat, gerente de Chipichape, en Cali, lo sabe bien, pues para ella asumir la dirección de un lugar construido sobre las antiguas bodegas del ferrocarril, al que considera “uno de los íconos más grandes de la región”, ha sido un reto profesional y, sobre todo, una oportunidad para transformar desde adentro los modelos tradicionales de liderazgo.

Su postura ha sido clara: hacer del centro comercial un motor para el liderazgo femenino en el Valle del Cauca. Por eso, durante su gestión y bajo su liderazgo ha buscado proteger el rol de la mujer y sus habilidades y capacidades en el mundo corporativo.

En términos de la conformación de su equipo de directores y gerentes de área, el 90 por ciento son mujeres, las cuales después de rigurosos procesos de meritocracia han sido seleccionadas para estos cargos. “En nuestra empresa la cultura organizacional es la clave del éxito de los desarrollos y procesos que llevamos a cabo. Propendemos por motivar la empatía y el espíritu emprendedor del equipo”, dijo. Una perspectiva que se traduce en las campañas internas de la entidad, pensadas más allá del consumo y centradas en la dignidad y el bienestar de quienes lo habitan. Un ejemplo de ello es la creación de la primera cabina de lactancia móvil en un espacio público de este tipo en el país.

Pero su compromiso trasciende los gestos simbólicos. Desde la gerencia del centro comercial, Bibiana Barakat ha impulsado transformaciones estructurales que promueven la equidad de género, mediante políticas de contratación inclusiva, alianzas con entidades como ProPacífico y el respaldo constante a marcas lideradas por mujeres, algo que puede evidenciarse a través de ferias, activaciones y zonas de diálogo, por medio de las cuales Chipichape se ha convertido en un escenario de encuentro para emprendedoras del sector comercio.

“Generamos plataformas con emprendimientos femeninos, ruedas de negocios y un foco de participación interna donde seamos mujeres las líderes y las claves de los desarrollos que estamos generando”, afirmó. Ahora bien, esa visión que impregna la cultura del centro comercial la ha construido desde muy temprano en su carrera. Con solo 24 años, Barakat asumió su primer cargo gerencial, una responsabilidad que la llevó a integrar distintas juntas directivas, a liderar procesos gremiales, y a desarrollar un estilo que no busca confrontar modelos masculinos, sino reconfigurar la idea de lo que significa liderar: “Para mí, liderar es acompañar a construir una visión colectiva, mantenernos firmes en momentos complejos y enriquecer la parte humana”.

En ese sentido, sostiene que para ella romper los paradigmas que aún asocian el liderazgo con dureza es una transformación urgente, y que el futuro depende de formar desde la infancia referentes femeninos fuertes, sin renunciar a su sensibilidad ni a su inteligencia emocional. “El liderazgo femenino es una amalgama maravillosa del esfuerzo, capacitación constante e intuición y empatía para construir equipos motivados que logren que la estrategia se materialice en desarrollos exitosos”.

La convicción de la que habla Barakat adquiere una dimensión tangible en el contexto que la rodea: la capital vallecaucana, con su diversidad y dinamismo, es para esta abogada un terreno fértil en el que las mujeres lideran como empresarias y creadoras de ciudad. Desde Chipichape, donde conviven 500 marcas, se proyecta un legado de expansión con propósito, que combina crecimiento económico con tejido social, sostenibilidad y transformación cultural; un legado que también refleja el liderazgo femenino como eje de desarrollo.

*Contenido elaborado con apoyo del Centro Comercial Chipichape