TELETRABAJO
Claves para implementar el trabajo flexible en una empresa
En el panorama de la nueva normalidad, las empresas están implementando rutinas laborales flexibles que permiten mantener la productividad de la compañía y el bienestar de sus colaboradores.
De acuerdo con un estudio de la consultora Mercer sobre el impacto de la covid-19 en las empresas, el 56% de los empresarios colombianos aseguraron necesitar a sus empleados en las oficinas para poder trabajar pero, dadas las circunstancias, el 88% de ellos está pensando en implementar prácticas de trabajo flexible que alterne el trabajo en casa con la oficina.
Sin embargo, si bien el teletrabajo era una tendencia en ascenso desde hace unos años en el país, a finales de 2019 solo el 32% de las empresas manifestaron tener políticas de flexibilidad en el trabajo y muy pocas tenían interés por implementar este sistema.
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Ahora, en medio de la crisis de la pandemia y con la llegada de la nueva normalidad, los empresarios aceleraron la implementación de estas dinámicas y demostró que las empresas sí están preparadas para implementar mecanismos de trabajo flexible y trabajo remoto.
En este sentido, Mercer planteó algunas claves que deben tener las empresas para tener una implementación exitosa del trabajo flexible.
En primer lugar, se deben establecer los parámetros para la dinámica de trabajo en equipo y la forma cómo se hará seguimiento y evaluación del equipo.
“Por esto es muy importante tener claro que la flexibilidad no es simplemente decir ‘haz lo mismo desde la casa’, es redefinir la forma como se trabaja y para ello es necesario entender el contexto cultural de la organización, el estilo de liderazgo, las capacidades y el contexto familiar de los trabajadores, además de procesos como la gestión del desempeño que pueden requerir revisión”, aseguró Luis Fernando Londoño, consultor sénior para Mercer.
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En segundo lugar, las empresas deben establecer reglas de juego claras en temas puntuales como ajustes de contratos, adecuación de los puestos de trabajo con la tecnología necesaria, los riesgos psicosociales que los empleados pueden tener, cambios culturales, la seguridad laboral, salud e higiene, entre muchos más.
En este sentido, un análisis desarrollado por el portal Enterapia.co reveló que la mala implementación de políticas de trabajo flexible podría causar el desperdicio de 3.350 días laborales debido a los bajos niveles de productividad de sus colaboradores, originados por cuadros de estrés, depresión y ansiedad.
Por esta razón, antes de empezar a fortalecer las políticas de trabajo flexible las empresas deben cuestionarse sobre temas como: ¿Cómo tendría que adaptar los contratos para flexibilizar ciertas condiciones frente a otras metodologías de trabajo?, ¿qué implicaciones legales y normativas tendría la organización si es trabajo remoto, teletrabajo o trabajo flexible? y ¿cómo se puede redefinir el paquete de beneficios que tienen los trabajadores (auxilio de transporte, ruta, gimnasio, entre otros) para adaptarse a la nueva realidad?.
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