Opinión
¿Cómo impactará la reforma laboral en el turismo? Estas son las preocupaciones del sector hotelero
La reforma laboral preocupa al sector hotelero, que hace un llamado a soluciones laborales que protejan a los trabajadores, pero sin afectar la viabilidad económica de la industria.

Las 150.000 familias de quienes integran el servicio de la hotelería del país están a la expectativa de lo que pase en estos días. Desde Cotelco hemos alzado la voz de alarma: la reforma laboral propuesta, si no se maneja con sensibilidad a un sector atípico como el nuestro, podría no solo frenar el desarrollo de una industria vital para nuestra economía, sino también impactar negativamente en la generación de empleo y la formalidad sectorial que tanto nos cuesta generar y mantener.
Los números no mienten. El sector de alojamiento y servicios de comida arrastra dos años de pérdidas millonarias, sumando cerca de 3,3 billones de pesos, según el Dane. Y sí, la llegada de visitantes internacionales es un respiro positivo importante, pero no compensa el golpe que significa la caída del turismo interno, ese que mueve nuestras regiones del país.
A esto se suma una competencia desleal. La informalidad crece sin control, especialmente con el auge de las viviendas turísticas sin planificación y controles. Aunque a veces están registradas, operan sin pagar los impuestos por la actividad, sin cumplir las normativas, ni ofrecer la calidad y seguridad que sí garantizamos los hoteles formales.

El 90 por ciento de estas viviendas, según ellas mismas ante el RNT, no generan un solo empleo directo. Esto crea una desigualdad abismal mientras la formalidad debe asumir costos operacionales fijos necesarios de nómina. ¡Hay más de 104.000 viviendas turísticas en cuatro plataformas digitales frente a solo 67.000 en el RNT! Y lo peor es que su crecimiento es exponencial en nuestras ciudades, ahora con un nuevo obstáculo: la reforma laboral.
Nuestra industria es una de las más intensivas en mano de obra. Dependemos de personas maravillosas que hacen posible la experiencia de nuestros huéspedes. Desde el personal de limpieza que deja impecable cada habitación, hasta los recepcionistas que reciben con una sonrisa, los meseros que sirven con amabilidad y los chefs que deleitan con su sazón. Cada uno de ellos es un engranaje vital en la maquinaria del turismo colombiano.
La reforma laboral amenaza con disparar los costos operativos de la hotelería colombiana, especialmente por los cambios en jornada nocturna y festivos. Esto es grave para un sector que ya enfrenta competencia desleal de inmuebles que ofrecen alojamiento sin pagar impuestos asociados a su actividad, ya que también son prestadores de servicios turísticos. Se estima un aumento de cerca de medio billón de pesos en nómina con esos cambios de jornada nocturna y dominicales y festivos.
La hotelería opera 24/7, y ya asumimos altos recargos en noches y festivos, son más de dos meses y diez días entre dominicales y festivos con recargos del 75 por ciento mínimo sin contar adicionales de extras. Trasladar estos costos operacionales al precio es inviable, pues el sector es altamente competitivo, y hemos visto que sin haber transferido el 19 por ciento del IVA desde 2023, crece por debajo de la inflación. Con la creciente informalidad que no genera empleos directos ni formales, se presionará más este sector.
La caída del turismo interno, confirmada por el Dane, representa una grave amenaza para el empleo en la hotelería, un sector vital para mujeres (48 por ciento) y jóvenes (25 por ciento), así como para zonas rurales. Con una reducción del 7 por ciento en empleos directos ya registrada en 2023, la continuidad de esta tendencia podría comprometer la estabilidad laboral de 150.000 familias colombianas.
Frente a todo esto el sector pide soluciones laborales equilibradas que protejan a los trabajadores sin afectar la viabilidad económica, reconociendo su operación ininterrumpida. Mientras en otros países la jornada nocturna hotelera inicia más tarde (diez, once de la noche) en Colombia se propone adelantarla. Es fundamental un diálogo sensato y la unión para asegurar que el turismo continúe siendo un motor de progreso para el país.
*Presidente ejecutivo de Cotelco Nacional