Hacia un futuro sostenible: los compromisos clave de la COP16 en Colombia

La COP16 llega en un momento crítico para enfrentar la llamada triple crisis planetaria (pérdida de biodiversidad, cambio climático y contaminación), que requiere soluciones integrales. “Se espera que el encuentro logre integrar las agendas de clima y biodiversidad, reconociendo la estrecha relación entre ambas”, advirtió Carlos Mauricio Herrera, director de Conservación y Gobernanza de WWF Colombia, quien agregó que los países deben buscar soluciones integradas que aborden conjuntamente estas problemáticas.

El evento es clave para avanzar en el Marco Global de Biodiversidad Kunming-Montreal, que establece objetivos para reducir amenazas, restaurar ecosistemas y fortalecer mecanismos financieros para 2030. “Tratados como este y el Acuerdo de París deben ser una prioridad. Esta COP16, al ser la primera tras la adopción del Marco, representa la oportunidad decisiva para que el mundo evalúe el avance en su implementación”, destacó Herrera.

Como país anfitrión, Colombia tiene la oportunidad de promover acuerdos para enfrentar la crisis climática, aprovechando su diversidad de ecosistemas y culturas como laboratorio natural para la investigación. Juan Lucas Restrepo, director general de la Alianza de Bioversity International y el CIAT, aseguró que además de la discusión del Marco, es esencial avanzar en desafíos complejos que requieren consenso internacional, como la secuenciación digital de recursos genéticos y su beneficio para comunidades indígenas y campesinas.

“Aunque el Protocolo de Cartagena sentó precedentes, ahora se necesita un acuerdo entre los sectores privado, público y diferentes regiones globales. La COP16, bajo la presidencia de Colombia, tiene la tarea de avanzar significativamente en estos temas, incluyendo la creación de un fondo multilateral para implementar el acuerdo de Montreal, lo que también será un gran desafío”, añadió Restrepo.

El manejo efectivo de las áreas de conservación será fundamental para cumplir con la meta 3 del Convenio de Diversidad Biológica (CDB), que requiere que el 30 por ciento de estas áreas en ecosistemas marinos y continentales sean gestionadas de manera eficiente y equitativa. “A pesar de la creación de numerosas áreas protegidas, estas enfrentan importantes desafíos debido a la degradación y transformación”, afirmó Catalina Gutiérrez Chacón, directora de Wildlife Conservation Society Colombia.

Colombia registra avances en áreas protegidas y políticas de conservación, pero enfrenta amenazas como la deforestación y el cambio climático. La COP16 es vista como una plataforma para coordinar y abordar estas amenazas. Para el director de Conservación y Gobernanza de WWF Colombia, “el proceso de la actualización del Plan de Acción de Biodiversidad y la actualización de los compromisos climáticos son también una oportunidad única de generar los cambios que nos pide el planeta, fortalecer los compromisos y construir un futuro positivo para la naturaleza y las generaciones futuras”.

Entre las acciones prioritarias están mantener la integridad de los ecosistemas, evaluar especies en peligro, restaurar territorios transformados y gestionar especies foráneas. “También hay que aumentar las áreas en proceso de restauración, especialmente en territorios recién transformados, y gestionar las especies foráneas con base en evidencia y principios de precaución. Además, se debe fomentar la participación de las comunidades en estos procesos, monitoreo y toma de decisiones sobre los entornos locales”, añadió Gutiérrez Chacón.

Otro de los principales desafíos que enfrentará la COP16 es asegurar el financiamiento necesario para la conservación de la biodiversidad. Las áreas protegidas, que cubren aproximadamente el 30 por ciento del territorio nacional, requieren recursos financieros sostenibles para su gestión efectiva. Parques Nacionales de Colombia ha identificado la cumbre global como una oportunidad para asegurar compromisos financieros de largo plazo, que permitan la protección continua de estos ecosistemas estratégicos.

La conferencia también será crucial para fortalecer los vínculos entre biodiversidad y cambio climático. Carolina Navarrete, de la Alianza Bioversity-CIAT, destacó la necesidad de alcanzar compromisos globales para apoyar a países en desarrollo en la implementación del Marco Global de Biodiversidad. “Debe estar enfocado en fortalecer capacidades y cooperación técnica en los países que más lo necesitan, apoyando la implementación del Marco Global de Biodiversidad. Aunque existen instrumentos y mecanismos financieros, es esencial su escalamiento y sostenibilidad mediante un mayor respaldo político y financiero, con enfoque en equidad y acceso equitativo. También se busca un compromiso político que articule esfuerzos integrados en biodiversidad, cambio climático y desertificación, tanto en políticas como en financiamiento”, agregó.

Paz y naturaleza

Otro aspecto relevante de la COP16 es la oportunidad de vincular los esfuerzos de conservación con la construcción de paz en Colombia. El Instituto Humboldt y otras organizaciones como WWF han subrayado la importancia de un enfoque que integre la justicia ambiental, los derechos humanos y la paz. Este enfoque podría materializarse en un Pacto Global de Paz y Naturaleza, liderado por Colombia, que promueva la gestión sostenible de los recursos naturales como una vía para resolver conflictos y construir territorios resilientes. “Desde WWF Colombia esperamos que la COP16 genere compromisos firmes para la financiación de acciones de conservación en los territorios, reconociendo las contribuciones de los grupos indígenas, afrodescendientes y campesinos en la protección y restauración de la naturaleza. También esperamos una clara manifestación de cómo adelantar acciones de paz con la naturaleza para reducir conflictos socioambientales”, señaló Herrera.

La COP16 en Colombia puede ser también clave para consolidar compromisos, compartir mejores prácticas y establecer metas que se revisen en la COP30 en Belém, Brasil. Los resultados podrían impactar globalmente y sentar las bases para un futuro donde la biodiversidad y el bienestar humano estén en equilibrio. “Hay una urgente necesidad de actuar ante la crisis múltiple que enfrentamos y alcanzar consensos para combatir las amenazas. La COP16 debe ser el escenario clave para reconstruir nuestra relación con la naturaleza, restablecer la confianza y cumplir compromisos. Es el momento para que los líderes mundiales hagan ajustes drásticos en sus ambiciones y acciones frente a la crisis climática causada por el ser humano”, concluyó Herrera.