Sostenibilidad
¿Puede la biodiversidad convertir a Colombia en una potencia mundial de la cosmética?
El tamaño del mercado de productos cosméticos y de cuidado personal en Colombia llegó a 2.756 millones de dólares en 2023, un 9,7 por ciento más que en 2022. Hoy, su crecimiento depende en gran medida de la biodiversidad.
Gracias a su biodiversidad Colombia es un eje estratégico para el desarrollo de toda clase de industrias que, justamente, encuentran en esa riqueza natural la posibilidad de crear modelos de negocios sostenibles y con grandes proyecciones de crecimiento. Y de esa realidad es testigo la industria cosmética.
Según datos de la Cámara de Cosméticos y Aseo de la Andi, el tamaño del mercado de productos cosméticos y de cuidado personal en Colombia fue de 2.756 millones de dólares en 2023, un 9,7 por ciento más que en 2022. Esos indicadores ubican al país como el quinto mercado más importante en la región latinoamericana y el primero en el mercado andino.
Ese potencial de crecimiento se apalanca en una vasta disponibilidad de recursos naturales. De hecho, de las 45.000 especies de plantas identificadas en Colombia, unas 1.500 son endémicas y aptas para el desarrollo de productos cosméticos. Asaí, cacay, sacha inchi, café, guayaba, aguacate o camu-camu son solo algunos de los productos ricos en propiedades.
Extractos naturales
Por ese mismo motivo, desde el Gobierno nacional y el sector privado trabajan diferentes estrategias para darle vida a una industria que, además, es clave para el aumento de la productividad nacional. A esa tarea se sumó el Programa Suizo para la Promoción de Importaciones, que, en alianza con varias entidades del orden nacional, y la Cámara de Comercio de Bogotá, promueve y desarrolla empresarios del sector.
Tendencias
Justamente, uno de estos emprendimientos es Inverbeauty, una compañía que nació en 2011 y se dedica a extraer los mejores metabolitos de las plantas y frutas para fabricar extractos naturales o ingredientes que hacen parte de las fórmulas con las que se producen cosméticos y otros productos para el cuidado personal como protectores solares, champús, jabones, cremas e hidratantes.
Jorge Forero, director general de la empresa, señaló que cuentan con más de 500 extractos naturales en su portafolio de prácticamente todas las frutas colombianas, así como de algodón, arroz, tomillo, caléndula y cúrcuma, los cuales venden a empresas nacionales y extranjeras de todos los tamaños. “Colombia puede ser una gran potencia en la fabricación de este tipo de productos debido a su ubicación geográfica; sin embargo, hace falta más apoyo, más organización y articulación entre el Gobierno y la cadena productiva para aprovechar de una mejor manera las ventajas del país y apoyar a las comunidades”, señaló Forero.
Oportunidad de oro
Según Yeili Rangel, directora de la Cámara de Cosméticos y Aseo de la Andi, aprovechar los ingredientes naturales de la biodiversidad es una de las grandes apuestas de la industria, “pues los componentes naturales son parte esencial de los productos cosméticos. Ingredientes como aceites esenciales se encuentran presentes en todos los productos y han sido usados plenamente en nuestro sector”, destacó.
Con la canasta de productos de belleza, Colombia logró exportar cerca de 200 millones de dólares durante el año pasado a países como México, Ecuador o Perú. No obstante, una de las apuestas es llegar a exportar más de 780 millones de dólares durante la próxima década, principalmente, en cosméticos de origen natural y productos de aseo para el hogar, lo cual podría crear más de 40.000 empleos en el país.
Un estudio de la consultora Grand View Research estima que, debido a las preferencias de los consumidores por productos sostenibles y ecológicos, unido a una mayor disponibilidad en tiendas minoristas y plataformas en línea, este mercado puede crecer cerca de 9,1 por ciento en los próximos años.
Para Colombia, “esto representa una oportunidad de capitalizar la ventaja competitiva que ofrece su gran diversidad biológica y su posición geográfica privilegiada”, señalaron desde el Instituto Humboldt. Para esta institución de investigación también es fundamental el trabajo articulado con el sector privado, que desempeña un papel fundamental en el desarrollo de innovaciones que permitan la creación de nuevos productos y servicios derivados del uso sostenible del capital natural. Así mismo, “puede proporcionar inversión y estimular la demanda de nuevos productos, al mismo tiempo que fomenta prácticas sostenibles que destacan nuestras relaciones y dependencias con la biodiversidad”, añadieron desde el Humboldt.
Compromiso empresarial
Desde la Cámara de Comercio de Bogotá, a través de la Iniciativa Clúster de Cosméticos, se trabaja una agenda para identificar y abordar los principales cuellos de botella que limitan la competitividad del sector.
A esta estrategia están vinculadas empresas de maquillaje, perfumería, higiene personal, cuidado de manos y pies, tratamientos corporales y productos capilares, entre otros. “Buscamos aunar esfuerzos para adelantar actividades conjuntas de interés institucional y empresarial que impulsen el sector”, explicaron desde la Cámara.
Dentro de los objetivos de esta alianza está fortalecer las capacidades empresariales, generar desarrollo sostenible y consolidar un portafolio de empresas de ingredientes naturales a través de articulación de actores, proyectos y eventos de talla mundial.
Por otra parte, el Centro Nacional del Agua y la Biodiversidad de la Andi ha desarrollado proyectos para fortalecer la capacidad técnica, logística y financiera entre instituciones y empresas para trabajar en la protección, conservación, restauración, conectividad ecosistémica y desarrollo sostenible de la biodiversidad.