Opinión
Diversidad, equidad e inclusión: Por un compromiso real y sin etiquetas
La transformación hacia un entorno laboral inclusivo comienza con un liderazgo consciente que desafíe los sesgos presentes y que fomente espacios de diálogo sincero.

Cada junio, el mundo celebra el Mes del Orgullo, un recordatorio de la lucha histórica por los derechos de la comunidad LGTBIQ+. Es un periodo que invita a la reflexión y a la acción, sobre todo en el ámbito laboral en Colombia. A menudo, las organizaciones se enfocan en el símbolo del orgullo —los colores del arcoíris— y las campañas de marketing que acompañan a este mes. Sin embargo, como Vicepresidente de Operaciones de Foundever en Colombia, tengo claro que es crucial entender que la diversidad, equidad e inclusión (DEI) deben ser parte del ADN de cualquier empresa, trascendiendo lo superficial y convirtiéndose en un compromiso genuino hacia la comunidad.
Cuando hablamos de DEI, debemos reconocer que estos conceptos no son solo palabras de moda. Por diversidad entendemos la representación de las diferencias humanas en el entorno laboral: género, edad, orientación sexual y mucho más. La equidad, por su parte, implica garantizar que cada individuo tenga acceso a los recursos y oportunidades necesarias para alcanzar su máximo potencial, ajustando el apoyo según las necesidades específicas de cada uno. Finalmente, inclusión se refiere a crear un ambiente en el que todos se sientan bienvenidos, respetados y valorados.
La situación laboral en nuestro país refleja inquietantes disparidades. Según reportes del DANE de 2022, la tasa de desempleo entre la población LGTB alcanzó el 14,8%, un número que excede en 3,1 puntos porcentuales la tasa de la población no LGBT (11,7%). Esta diferencia nos reta a buscar respuestas y soluciones efectivas. La falta de reconocimiento y oportunidades genera que un significativo 39,8% de las personas LGTBIQ+ en el mercado laboral perciban ingresos por debajo del salario mínimo. Esto no solo es preocupante desde una perspectiva económica, sino que también impacta negativamente en la dignidad y en el bienestar de estas personas.
Como empresa y líderes creemos firmemente que un entorno laboral inclusivo es uno donde cada individuo pueda ser auténtico, valorado y plenamente expresado. Actualmente, el 46% de nuestros puestos de liderazgo están ocupados por mujeres, y en la Junta Directiva, el 60% de nuestros líderes son mujeres.
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La integración de la DEI en nuestras operaciones se materializa en iniciativas como nuestro programa “EverYou”, diseñado para crear un ambiente en el que todos se sientan escuchados y valorados, más allá de su orientación sexual o identidad de género. Este programa no se trata solo de un proyecto bien intencionado; es la manifestación de nuestra voluntad de romper los esquemas tradicionales que limitan el potencial humano y de construir un lugar donde las diferencias no solo se toleran, sino que se celebran.
Como líderes, nuestro papel es aún más crucial. La transformación hacia un entorno laboral inclusivo comienza con un liderazgo consciente que desafíe los sesgos presentes y que fomente espacios de diálogo sincero. Debemos preguntarnos: ¿Qué tan intencional es nuestro liderazgo en la creación de espacios seguros y respetuosos? Es fundamental que cada miembro de la organización participe activamente en este proceso. Escuchar y validar las experiencias de quienes forman parte de nuestras filas enriquecerá nuestras iniciativas y permitirá construir un verdadero sentido de pertenencia y empoderamiento.
Reflexionando sobre las políticas existentes, es crucial entender que quienes enfrentan discriminación a menudo provienen de contextos de vulnerabilidad multifacéticos. La Política Pública Nacional LGBTI, aprobada en 2018, busca promover la inclusión y la igualdad de derechos, pero aún queda un largo camino por recorrer. Los actos de violencia y discriminación continúan afectando a la comunidad LGTBIQ+ de manera preocupante. Es nuestro deber no solo acoger estas políticas, sino implementarlas de manera efectiva en nuestra cultura organizacional.
Incluso en el marco del Mes del Orgullo, es vital que nuestra celebración no se limite a una simple muestra visual. Promover un entorno laboral donde la DEI sea parte del ADN implica ir más allá de lo superficial; se trata de un compromiso genuino con la justicia y la igualdad. Este no es solo un llamado a las empresas, sino a toda la sociedad para que actuemos de manera colectiva y proactiva ante la discriminación.
Algunas de las recomendaciones que podemos seguir como líderes para fomentar la diversidad e inclusión (DEI) en las empresas son,
- Desarrollar políticas inclusivas: Establecer y comunicar políticas claras que promuevan la diversidad y la inclusión.
- Capacitación y sensibilización: Implementar programas de formación que sensibilicen a los empleados sobre la importancia de la DEI.
- Fomentar el liderazgo diverso: Asegurarse de que las oportunidades de liderazgo estén disponibles para todos los empleados, creando un camino claro para que las personas de diversos orígenes puedan avanzar en sus carreras.
- Crear espacios de diálogo: Establecer espacios seguros donde los empleados se sientan cómodos compartiendo sus experiencias y opiniones.
- Ajustar prácticas de contratación: Revisar los procesos de reclutamiento para asegurarse de que sean inclusivos.
- Celebrar la diversidad: Organizar eventos y actividades que celebren la diversidad y la inclusión a lo largo del año, no solo durante el Mes del Orgullo.
- Establecer metas y medir progresos: Definir metas claras en materia de DEI y establecer un sistema para medir el progreso hacia estas metas.
- Apoyar redes internas: Facilitar la creación y el funcionamiento de grupos de recursos para empleados enforcados en DEI.
- Escuchar a los empleados: Realizar encuestas anuales sobre inclusión y diversidad para recoger retroalimentación de los empleados.
- Compromiso de la alta dirección: Los líderes de la organización deben demostrar un compromiso genuino con la DEI, siendo visibles en su apoyo y participación en iniciativas relacionadas.
Es momento de unir fuerzas y de hacer que la diversidad, equidad e inclusión sean pilares permanentes de nuestra misión como líderes y de nuestras empresas. Al generar espacios donde todos puedan prosperar, garantizar un entorno de aceptación auténtica y fomentar el respeto hacia todas las identidades, fortalecemos nuestro equipo y contribuimos a un futuro donde la diversidad sea celebrada. No solo en el mes de junio, sino todo el año, porque lo valioso no son las etiquetas, sino lo que como seres humanos podemos aportar.
Por Catherine Hadechini, VP de Operaciones de Foundever en Colombia.