Opinión

Más mujeres en la aviación: derribar mitos y abrir oportunidades

Las cifras de participación femenina en esta industria reflejan oportunidades limitadas y estereotipos persistentes. Frente a estos desafíos, también hay historias de perseverancia y cambios estructurales que empiezan a abrir el cielo para las mujeres.

María Carolina Cortés Arce
5 de junio de 2025, 5:46 p. m.
Las mujeres piloto llegan apenas a un 5 por ciento en el mundo
Las mujeres piloto llegan apenas a un 5 por ciento en el mundo | Foto: 123RF

Hablar de mujeres en la aviación es abrir la puerta a un tema tan inspirador como necesario. Aunque el cielo parece un espacio sin fronteras, la realidad es que, para muchas mujeres, llegar a él sigue siendo un reto, un sueño que no se pudo cumplir porque “era muy caro” o porque “las mujeres no tienen proyección en esa carrera”. Y aunque la industria aérea ha avanzado en temas de equidad de género, las cifras revelan que aún queda un largo camino por recorrer.

Si nos vamos a las cifras, según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), solo el 5 por ciento de los pilotos en el mundo son mujeres, y apenas el 8 por ciento de mujeres ocupan posiciones de liderazgo en aerolíneas comerciales. Estos datos son más que números; representan oportunidades limitadas, estereotipos persistentes y desafíos que muchas enfrentan para abrirse paso en una industria históricamente dominada por hombres. Y ojo, con esto no me refiero a que los hombres sean el problema, sino que busco resaltar la importancia de fomentar equilibrio en la industria, basados en el talento y oportunidades que las mujeres traemos a la mesa.

La realidad ha llevado a empresas del sector a replantearse sus acciones para promover la equidad. No se trata solo de incluir más mujeres en la conversación, sino de generar espacios reales de desarrollo y crecimiento entendiendo que la diversidad es una realidad. La equidad es entregarle a cada uno lo que necesita para que sea exitoso y, la inclusión implica reconocer, valorar y apalancar puntos de vista, historias y preferencias.

Precisamente, a lo largo de mi historia en la aviación, he podido participar de proyectos que me llenan de orgullo y que buscan transformar realidades de la ‘mujer de a pie’, apostándole a romper no solo barreras económicas, sino también culturales y de representación. Y no por quedar bien como compañía, sino porque es lo correcto y necesario.

Más allá de los programas, siempre surge la pregunta de si es suficiente. Los retos son muchos: desde la falta de modelos femeninos en cargos de liderazgo hasta la persistencia de prejuicios que limitan el acceso a ciertas áreas. Pero, frente a estos desafíos, también hay historias de perseverancia y cambios estructurales que empiezan a abrir nuevos horizontes.

Las soluciones no pasan únicamente por impulsar políticas internas. La equidad debe abordarse desde la educación, la formación y la sensibilización en todos los niveles. Porque, para que más mujeres lleguen al cielo —y no solo como pasajeras— es clave que derribemos mitos y brindemos oportunidades reales desde las primeras etapas de formación profesional.

La industria aérea tiene ante sí la oportunidad de ser un referente en temas de equidad. Se ha demostrado que equipos diversos son más eficientes y creativos, lo que resulta crucial en un entorno tan dinámico como el de la aviación. Es hora de que las cifras de representación femenina dejen de ser una excepción y se conviertan en el denominador común.

Mirar hacia el futuro implica actuar en el presente. Si queremos un cielo verdaderamente para todos, debemos seguir construyendo espacios donde el talento, la pasión y la capacidad sean lo único que defina las oportunidades. Porque cuando las mujeres avanzan, la industria vuela más alto.

María Carolina Cortés Arce, vicepresidenta de Comunicaciones Corporativas y Reputación de Avianca