Maguie Cangueiro, Head of Vaccines en Sanofi COPAC

Opinión

El acceso sin barreras: la verdadera cobertura universal en salud

Este 12 de diciembre, Día de la Salud Universal, recordemos que la cobertura real se alcanza cuando cada persona puede acceder sin barreras a vacunas seguras y a las innovaciones que mantienen a raya las enfermedades prevenibles.

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Por: Maguie Cangueiro
10 de diciembre de 2025

Hablar de salud universal es hablar de prevención que llega a tiempo. La inmunización es una de las herramientas más poderosas y costo-efectivas de la salud pública y, después del acceso al agua potable, la que más transforma realidades. Según la Organización Mundial de la Salud, las vacunas han evitado alrededor de 154 millones de muertes en los últimos 50 años. Por eso, cuando la protección está disponible y cercana, la vida cotidiana fluye mejor: menos hospitalizaciones por causas prevenibles, menos gastos imprevistos y más días de estudio y trabajo.

Avanzar en cobertura es esencial, pero no suficiente. También necesitamos equidad en el acceso a las innovaciones. Las nuevas tecnologías en inmunización permiten reducir complicaciones y cortar cadenas de transmisión con mayor precisión. Sin embargo, si solo llegan a ciertos barrios o a determinados sistemas, la desigualdad se profundiza y el progreso se ralentiza. Universal no es solo llegar a más personas, es llegar mejor y con lo más pertinente para cada contexto.

Las brechas socioeconómicas siguen marcando diferencias tangibles, como son la distancia al punto de vacunación o los horarios incompatibles con la jornada laboral. Cada obstáculo se suma y suele pesar más sobre quienes ya partían con desventaja. En ese sentido, reducir esas barreras es clave para mantener el control de las enfermedades prevenibles y, en algunos casos, aspirar a su eliminación.

Vacunar nivela el terreno: ante las mismas amenazas, todas las personas merecen la misma protección. Los virus no distinguen niveles socioeconómicos, y asegurar esquemas a lo largo de la vida evita que el origen o el lugar de habitación determinen el riesgo.

La equidad en inmunización también fortalece al sistema de salud. Al disminuir la carga de enfermedades prevenibles, se liberan recursos para diagnóstico temprano, tratamientos complejos y seguimiento de condiciones crónicas. El resultado se ve en la calle y en los hogares: niños y niñas en clase, adultos trabajando, familias que no deben desordenar su presupuesto para atender una urgencia que pudo evitarse.

Desde mi experiencia en el desarrollo de programas de inmunización en la región, veo a diario el efecto de un acceso sin trabas: comunidades más tranquilas, menos trámites innecesarios y equipos de salud concentrados en acompañar, no en resolver demoras. Detrás de cada esquema completo hay engranajes que funcionaron y una familia que puede mirar adelante con menos incertidumbre.

El Día de la Salud Universal no es una consigna abstracta, es una invitación a sostener lo que funciona: inmunizaciones comprensibles, disponibles y al alcance de todos, junto con el compromiso de acercar las innovaciones donde más falta hacen. Si reducimos las brechas y garantizamos que la protección sea oportuna y justa, mantendremos a raya enfermedades que no deberían amenazarnos y daremos pasos firmes hacia su control sostenido e incluso, su erradicación. Vacunar sin barreras convierte la cobertura universal en una realidad.

Maguie Cangueiro, Head of Vaccines en Sanofi COPAC