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Astronautas hacen una impactante revelación de su terrorífico viaje que los dejó atrapados en el espacio por meses
Los viajeros presentaron una serie de fallas técnicas que casi provocan una tragedia a millones de distancia del planeta Tierra.

Los astronautas que quedaron atrapados durante meses a bordo de la Estación Espacial Internacional (ISS) revelaron que casi se perdieron en el espacio cuando la nave Boeing Starliner tuvo una falla en medio de la misión que estaban llevando a cabo.
Butch Wilmore y Sunita Williams quedaron atrapados en la ISS durante 286 días, luego de haber partido en junio del año pasado, debido a que la nave en la que estaban viajando produjo unas fallas que inhabilitaron su regreso.
La misión a la que fueron enviados tenía que durar tan solo ocho días. En las primeras ruedas de prensa que otorgaron luego de su regreso a la Tierra, aseguraron que la nave estaba presentando falencias desde el inicio de la misión, incluída una catástrofe que casi ocurre en el primer acercamiento a la ISS.

Además, recordaron que, cuando Wilmore tomó el control manual de la nave espacial, perdieron cuatro propulsores, y con ello, la capacidad de dirigir el vehículo de manera segura. Las regulaciones de este tipo de vuelo ordenan que, a pesar de estar muy cercanos a la estación espacial, deben regresar al planeta, pero Wilmore se dio cuenta de que en el proceso podía perder el control total de la nave, por lo que decidieron permanecer en el espacio a la espera de rescate.
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Ante la preocupante situación, Wilmore contó que tuvo un dilema de si intentar regresar a la Tierra pese a las complicaciones que estaban enfrentando, o si era una mejor opción ingresar a la ISS. “No sabíamos exactamente qué estaba pasando, por qué se están cayendo los propulsores y cuál sería la solución”, añadió Williams al medio Arstechnica.

Wilmore reveló más detalles sobre el angustiante momento que vivieron a la deriva del espacio, en el que presentaron una pérdida de control de 6 grados de libertad, tenían cuatro propulsores inactivos y podían visualizar la mecánica de la nave dañada. A eso se le sumó que se encontraban por debajo de la estación espacial, lo que provoca que la nave se moviera más rápido y aumentara el riesgo de perder el control.
Así mismo, explicó que Starliner —la nave en la que viajaban— usa un sistema de visión que utiliza la estación como marco de referencia, que además también estaba fallando, lo que provocó que “comenzáramos a caernos y a perder peso”, contaron los astronautas.
“Nunca perdimos la estación, pero sí empezamos a desviarnos un poco”, agregó Wilmore. “Creo que ambos estábamos un poco nerviosos porque el sistema nos habría abortado automáticamente”.

El estresante momento pudo resolverse en cuanto la Nasa pudo reiniciar los propulsores, luego de que Wilmore tuviera que reiniciar el control de la cápsula de manera manual, dejándose a sí mismo y a su compañera flotando en el inmenso espacio. “No fue fácil hacerlo”, añadió Wilmore.
Finalmente, los propulsores volvieron a funcionar, aliviando los nervios de los astronautas. Al recordar el desarrollo de los hechos, Williams dijo que se sintió “superfeliz”. Luego del victorioso anclaje de la nave a la estación espacial, los viajeros recalcaron que pensaban que era muy poco probable que pudieran usar la misma nave para emprender una ruta de regreso al planeta.