Atención: se suicida uno de los exmilitares condenados a 25 años de cárcel por muerte de Víctor Jara

La Corte Suprema de Chile condenó el pasado lunes 28 de agosto a siete militares en retiro a penas de hasta 25 años de prisión, por el secuestro y asesinato del emblemático cantautor Víctor Jara hace 50 años, días después del golpe de Estado de Augusto Pinochet.

Este martes se conoce la noticia de que Hernán Chacón Soto, de 86 años, atentó contra su vida en el momento en que las autoridades acudieron a su vivienda para arrestarlo y llevarlo a la cárcel de Puntateuco, en Chile.

Acusación

A dos semanas de que se cumpla el aniversario del sangriento derrocamiento de Salvador Allende el 11 de septiembre de 1973, el máximo tribunal impartió la sentencia definitiva por el crimen de Jara, una de las voces más reconocidas de la música popular de América Latina.

Siete antiguos oficiales fueron sentenciados a pagar entre 8 y 25 años de prisión, según dictaminó la corte que decidió elevar las penas fijadas inicialmente, tras analizar un recurso de revisión presentado por los acusados.

Suicidio

De acuerdo con el diario chile La Tercera, en el momento en que los detectives llegaron a la residencia de Chacón el hombre les indicó que se pondría a disposición de ellos, pero que primero debía ir por unos medicamentos y objetos personales a su dormitorio.

“Durante la mañana de hoy, funcionarios llegaron hasta un departamento con el objeto de practicar una notificación de una resolución judicial. En ese contexto, el morador del inmueble tomó un arma de fuego efectuándose un disparo que le provocó la muerte. Solicitamos la concurrencia de la Brigada de Homicidios con el Laboratorio de Criminalística, quienes están realizando las primeras pericias en el lugar”, explicó el fiscal Claudio Suazo, de la Fiscalía Metropolitana Oriente, según La Tercera.

Estadio

Dentro del mismo caso, los jueces los condenaron también por el asesinato y el secuestro del exdirector de prisiones Littré Quiroga, quien estuvo detenido junto a Jara en el entonces llamado Estadio Chile, que hoy lleva el nombre de Víctor Jara, y que llegó a albergar a 5.000 detenidos.

Hernán Chacón, quien se suicidó, así como los exoficiales del Ejército Raúl Jofré, Edwin Dimter, Nelson Haase, Ernesto Bethke y Juan Jara recibieron una condena de 15 años por el asesinato de Jara y Quiroga, además de otra adicional de 10 años por ambos secuestros, según el fallo.

El militar Rolando Melo recibió una pena de ocho años como encubridor. Con edades entre los 73 y 85 años, los condenados seguían inicialmente el proceso en libertad.

Otro de los acusados como autor material, Pedro Barrientos, está requerido en extradición desde Estados Unidos.

La corte federal de Florida lo declaró en junio de 2016 responsable del asesinato de Jara, y ordenó el pago de 28 millones de dólares en compensación a su familia.

44 balazos

Militante del Partido Comunista, Jara fue detenido, torturado y asesinado de 44 balazos tras ser detenido en la Universidad Técnica del Estado, donde ejercía como profesor. Tenía 40 años.

Littré Quiroga era director nacional de prisiones y también militante del Partido Comunista. Recibió 23 balazos.

Autor de temas como Te recuerdo Amanda, El derecho de vivir en paz o Manifiesto, Víctor Jara es considerado un símbolo de la Nueva Canción Chilena, un movimiento musical y social de años 60 hasta el comienzo de la década del 70.

Su asesinato fue uno de los más alevosos cometidos por la dictadura (1973-1990), que dejó como saldo 3.200 víctimas, entre muertos y desaparecidos. Jara fue castigado con saña por los militares por ser una figura pública en esa época.

Tortura

“Se le aplicaron torturas físicas, siendo los golpes más severos aquellos que recibió en la región de su rostro y en sus manos”, según la investigación del juez Miguel Vázquez.

Las agresiones “tuvieron como principal aliciente” su actividad artística, cultural y política, “estrechamente vinculada al recién derrocado Gobierno”, del socialista Salvador Allende, agrega la sentencia.

Después de tres días de torturas, cuando se dispuso el traslado de los detenidos en el Estadio Chile al Estadio Nacional, Jara y Quiroga fueron separados de los prisioneros y llevados a los camarines, donde se les dio muerte.

Cadáveres

Los cuerpos de ambos fueron arrojados a la vía pública, junto a otros cadáveres. Fueron identificados por pobladores y llevados al Instituto Médico Legal, donde el cadáver de Jara fue entregado a su familia, que lo sepultó en secreto.

En diciembre de 2009, 36 años después de su muerte, la justicia chilena ordenó la exhumación de sus restos, lo cual permitió que el artista fuera enterrado en una ceremonia oficial en la que participó la entonces presidenta de Chile, Michelle Bachelet.

Con información de AFP