China registra récord de nuevos casos diarios de covid-19

El número de casos diarios de covid-19 en China alcanzó un récord desde el inicio de la pandemia, mostraron datos oficiales el jueves, en medio de múltiples brotes y restricciones por todo el país.

China registró un total de 31.454 nuevos casos el miércoles, de los que 27.517 eran asintomáticos, indicó la Oficina Nacional de Salud de este país de 1.400 millones de habitantes.

El récord precedente se remontaba a mediados de abril de este año, con 29.390 infecciones, coincidiendo con el confinamiento de Shanghái, la tercera ciudad más poblada del mundo, que se alargó durante dos meses y provocó problemas de abastecimiento para sus habitantes.

China es la única gran economía del mundo que todavía persigue erradicar por completo el virus de su territorio con confinamientos de ciudades enteras, aislamiento de los contactos de positivos y test masivos.

La capital china experimenta su peor brote epidémico desde el inicio de la pandemia a fines de 2019. Decenas de inmuebles residenciales fueron confinados y las empresas pasaron en su gran mayoría al teletrabajo.

Pekín anunció el miércoles casi 1.500 nuevos casos, la inmensa mayoría asintomáticos, en una población de 22 millones de habitantes. Es la cifra más elevada en la ciudad, aunque muy baja respecto a los estándares internacionales.

Escuelas, restaurantes y comercios cerraron por temor de verse en cuarentena, mientras el cansancio y la fatiga mental de los habitantes no para de aumentar por estas restricciones, a menudo vagas y cambiantes, cuya duración nunca se anuncia de antemano.

Niño murió porque sus padres no pudieron llevarlo al médico al estar confinados por ola de covid-19

Indignación generó en China, a inicios de este mes, la noticia de la muerte de un pequeño niño de tres años a quien la situación actual de confinamientos, como medida para frenar los escenarios de difusión del nuevo coronavirus, impidió que sus padres lo pudieran llevar de forma oportuna a un centro hospitalario para recibir atención médica.

El pequeño falleció por envenenamiento por monóxido de carbono originado al interior de la vivienda en la que se encontraba.

Los hechos ocurrieron en la ciudad de Lanzhou, una localidad ubicada en el nordeste del país y que, debido a los recientes reportes de casos de nuevo coronavirus, se ha mantenido en cuarentena a lo largo de ya casi un mes, derivando en problemas para sus mismos pobladores.

Un ejemplo de ello es precisamente lo ocurrido con el menor, quien no pudo acudir oportunamente a un hospital, debido a las trabas que le pusieron las autoridades médicas para romper la medida y acudir a recibir la atención médica que requería.

Si bien el pasado martes las autoridades policiales del referido pueblo dieron a conocer la noticia del deceso del niño a través de un comunicado, un nuevo pronunciamiento de las autoridades se reveló el pasado miércoles, ahora reconociendo la existencia de retrasos en la prestación de los servicios requeridos.

Este nuevo pronunciamiento se presentó, precisamente, después de que se revelaran algunos pormenores de los hechos que rodearon la muerte del niño, los cuales originaron una ola de críticas contra las autoridades. Se pudo evidenciar que, más allá del envenenamiento, el factor determinante para su muerte fue, precisamente, la negligencia de las autoridades para permitir que este accediera en forma oportuna a un servicio de salud.

Sobre el hecho, medios internacionales han citado las palabras del padre del niño, un hombre de apellido Tuo, quien, a través de sus redes sociales, presentó sus versiones sobre lo ocurrido. Advirtió que fue víctima de múltiples trabas por parte de los funcionarios sanitarios que le impidieron, pese a la emergencia, salir oportunamente de la casa, sin entender que lo que lo convocaba era precisamente una emergencia de salud de su hijo.

Debido a las trabas, cuando el hombre logró llegar al hospital con su hijo en brazos, lamentablemente ya era tarde y el niño había perdido la vida.

En ese mismo sentido, el padre denunció que se encontró con negligencia de las líneas de emergencia, si se tiene en cuenta que, pese a haber solicitado el servicio urgente de una ambulancia para el traslado de su hijo, esta se tardó más de 90 minutos en ser asignada. Por esto, el padre tuvo que recurrir a intentar acceder a otros medios para dirigirse al hospital por su cuenta.