Turismo
Crisis en el turismo peruano: 70% de las reservas de hoteles en Cusco para fin de año fueron canceladas
Las motivaciones estarían derivadas de la fuerte ola de protestas derivadas de la inestabilidad política que vive el Perú.
Preocupados, así se han manifestado ante medios locales de su país algunos de los comerciantes del sector hotelero y demás sectores relacionados con el comercio en la ciudad de Cusco, Perú. Esta situación les viene golpeando las finanzas durante esta temporada de final de año, y es por cuenta de la masiva cancelación de las reservas para esta temporada del cierre de año.
Precisamente, uno de los motivos que ha impulsado a miles de personas a desistir de sus viajes a las ciudades imperiales incas, y a disfrutar de unos días en los andes suramericanos, se traduce en la difícil situación de orden público que ha atravesado Perú en las últimas semanas por cuenta del estallido social, y que ha estado marcado por las ingentes manifestaciones que han tenido consecuencias en las vías, comercios, y demás actividades productivas.
Así, los turistas han preferido privarse de eventuales contratiempos, y han recurrido a las cancelaciones de sus reservas.
Sin embargo, el elevado porcentaje de reservas que han sido canceladas por los turistas enciende importantes alarmas en los sectores turísticos de Perú, pues de acuerdo con la información recogida por medios locales, dichas reprogramaciones o retiros de la reserva han alcanzado hasta el 70%, lo que representa un mal momento para la industria que buscaba alcanzar cifras positivas encaminadas a la recuperación económica tras las pérdidas vividas en la etapa más dura de la pandemia por covid-19.
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En declaraciones recogidas por medios locales en Perú, el vicepresidente de la Cámara de Hoteles de Cusco, Fernando Santoyo, ratificó la elevada cifra de cancelaciones, advirtiendo que el impacto para el sector es realmente grande y lamentable.
En ese sentido, las revelaciones han descrito que las cancelaciones de reservas no solo están relacionadas con el turismo extranjero, sino que también una elevada porción de las reservas realizadas por habitantes locales también se ha visto trastocada.
Sobre el particular, es importante tener en cuenta que los sectores golpeados son un amplio abanico, en tanto del turismo no solo viven los sectores hoteleros y gastronómicos, sino también el encargado de suplir los servicios de transporte de turistas, las agencias de viajes, los artesanos, y hasta el comercio de detalles, recuerdos y los supermercados.
De acuerdo con los voceros del sector, si bien se esperaba que, en medio de la recuperación del sector, se alcanzara cerca del 85% de ocupación hotelera para las fechas especiales de diciembre, la ocupación hotelera a duras penas alcance el 45%, lo que a su vez representa importantes pérdidas económicas.
En cuanto a la llegada de turistas a la zona a través de servicio público, las autoridades han reportado una reducción de hasta la ⅔ partes de lo esperado.
La ola de protestas en Perú se desencadenó el pasado 7 de diciembre en medio de varios hechos políticos, entre los que se cuenta la destitución del presidente Pedro Castillo Terrones a través de la aprobación de una moción de vacancia por parte del Congreso de su país, hecho a los que se sumaron el ascenso al poder de su entonces vicepresidente, Dina Boluarte, y su negativa a llamar de inmediato a elecciones generales.
La situación política suscitó a su vez un estallido social que representó que en varias de las provincias del país, importante proporción de personas salieran a manifestarse en las calles, en medio de protestas que se han tornado violentas, y que, en medio de la represión policial, ya han dejado cerca de 28 personas fallecidas, requiriendo además la visita de una comisión de la CIDH ante las fuertes denuncias de violación de los Derechos Humanos.