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El mundo cerca del abismo nuclear. ¿Qué fue la crisis de los misiles en Cuba?
Fueron 13 días de máxima tensión en los que el mundo estuvo al borde de una catástrofe nuclear.
La escalada del actual conflicto en el este de Europa recuerda otros episodios de la historia en los que el mundo no descartó la posibilidad de que se pudiera desencadenar una catástrofe nuclear. Ahora, Estados Unidos y la Otan consideran que el riesgo de que Rusia “oprima” el botón atómico es bajo, pero una posición muy diferente tenían en la década de los sesenta, bajo lo que se llamó la crisis de los misiles en Cuba.
El conflicto entre las “superpotencias” aumentó de tono hasta el punto en el que tanto Washington como Moscú desplegaron arsenal nuclear que puso al mundo en vilo. Para octubre de 1962, y a 15 años de haber empezado la Guerra Fría, el hallazgo de misiles soviéticos en la nación caribeña puso al reloj en cuenta regresiva.
Entre 1958 y 1959, y bajo la presidencia de Dwight D. Eisenhower, Estados Unidos desplegó misiles con ojivas nucleares a Turquía e Italia, países que buscaban evitar ser invadidos por los soviéticos.
De acuerdo con el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS), se trataba del armamento SM-78 Júpiter este tenía un rango de 2.400 kilómetros capaces de apuntar a “ciudades, áreas de concentración importantes y puntos de tránsito de tropas en caso de hostilidades”.
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Trece días de máxima tensión
El 14 de octubre de 1962 un avión espía de Estados Unidos detecta que su adversario ha desplegado misiles a unos 150 kilómetros de sus costas y que tenían el alcance para impactar Washington, Nueva York, Houston y Atlanta. Según el archivo del Departamento de Estado, “el primer ministro soviético, Nikita Khrushchev, llegó a un acuerdo secreto con Fidel Castro para colocar misiles nucleares y disuadir cualquier intento futuro de invasión”.
Lo anterior, tras la búsqueda fallida (un año antes, en abril de 1961) de derrocar el gobierno de Castro con la operación de Bahía de Cochinos que contaba con el respaldo del Gobierno norteamericano.
“Estas bases no pueden tener otro objetivo que el de brindar la capacidad de un ataque nuclear contra el hemisferio occidental”, dijo John F. Kennedy el 22 de octubre de 1962. Ese mismo día el mandatario pone en “cuarentena” a Cuba y se despliega casi un centenar de unidades navales en las inmediaciones de la isla, así como escuadrones aéreos con la orden de interceptar los cargueros soviéticos que se acercan.
¿Cómo se evitó una guerra nuclear?
El 24 de octubre, las fuerzas estratégicas se colocaron en un estado de alerta máxima: lo que precede el comienzo de una guerra nuclear. También se instaló el bloqueo naval para impedir el tránsito de buques soviéticos. Posteriormente, estos barcos dan media vuelta y se entra a una fase para poder negociar.
La condición fue que se retiraran los misiles soviéticos a cambio de que hicieran lo mismo los misiles estadounidenses en Turquía y se garantizara que Washington no invadiría a Cuba. Sin embargo, el 27 de octubre (“sábado negro”) una aeronave es derribada sobre la isla y su piloto muere. Ante el riesgo de volver a retornar las hostilidades, Kennedy envía a su hermano, Robert, para que negociara con el embajador soviético, Anatoli Dobryni y se diera más tiempo a una solución diplomática.
De acuerdo con el archivo nacional, la crisis había terminado, pero la cuarentena naval seguía en marcha hasta que los soviéticos dieron un paso atrás con sus bombarderos de Cuba y, en noviembre de 1962, Washington levantó la “cuarentena”. Los misiles que el país norteamericano había ubicado en Turquía se retiraron en abril del año siguiente.